Monómeros tendrá “supervisión máxima” por parte del Gobierno colombiano, confirmó la Superintendencia de Sociedades

Monómeros Colombo Venezolanos S.A., una de las empresas más importantes para el sector agroindustrial colombiano, fue sometida al máximo grado de supervisión por parte de la Superintendencia de Sociedades de Colombia.

Según informó la entidad, esta decisión, conocida como “control”, tiene un carácter preventivo y busca preservar la estabilidad financiera de la compañía, así como proteger los más de 1.500 empleos que genera.

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La medida fue confirmada tras resolver los recursos de reposición y apelación interpuestos, y no implica una toma de posesión ni una coadministración por parte del ente regulador.

De acuerdo con la Superintendencia de Sociedades, el régimen de “control” permite a la entidad supervisar de manera más estricta las operaciones de la empresa, autorizar transacciones fuera del giro ordinario de los negocios, promover planes de mejoramiento y, en caso necesario, convocar procesos de insolvencia.

Esta decisión responde a los desafíos financieros que enfrenta Monómeros, entre los que se incluyen una disminución en sus ingresos, problemas de flujo de caja y limitaciones en sus fuentes de financiación.

El superintendente de Sociedades, Billy Escobar Pérez, explicó que esta medida busca garantizar la sostenibilidad de Monómeros como una unidad productiva clave para el sector agrícola colombiano.

Según Escobar, la empresa presenta oportunidades de mejora en su situación financiera, lo que justifica un acompañamiento más cercano por parte del ente regulador. “El próximo paso será la elaboración y monitoreo de planes de mejoramiento que permitan evaluar y adoptar las medidas necesarias”, afirmó el funcionario.

La figura de “control” otorga a la Superintendencia de Sociedades amplias facultades para intervenir en aspectos estratégicos de la empresa. Entre estas se incluyen la autorización de reformas estatutarias, procesos de capitalización y el otorgamiento de garantías sobre los bienes de la sociedad. Además, la entidad puede intervenir en operaciones extraordinarias y promover soluciones en caso de insolvencia.

Sin embargo, la Superintendencia aclaró que esta supervisión no implica una toma de posesión ni habilita al ente regulador para coadministrar la compañía. Monómeros conservará su autonomía operativa, aunque con restricciones específicas orientadas al cumplimiento de los objetivos definidos por la Constitución y la ley.

La confirmación de esta medida llega en un momento de alta tensión para Monómeros, en medio de rumores sobre una posible venta de activos a la empresa Nitrofert Asset Management SAS. Según reportó el superintendente Escobar, la entidad no ha recibido información oficial sobre esta transacción, pero advirtió que cualquier intento de venta debe cumplir con las normativas legales y respetar las obligaciones laborales y sociales de la empresa.

Nitrofert, liderada por Jorge Pacheco, anunció su interés en adquirir activos tangibles e intangibles de Monómeros, como propiedades, equipos, patentes y marcas comerciales, sin incluir la compra total de la compañía. Sin embargo, esta propuesta generó controversia.

Según una investigación de La Silla Vacía, Nitrofert estuvo involucrada en un intento fallido de toma hostil de Monómeros en 2021, y su reciente acercamiento al gobierno de Nicolás Maduro despertó sospechas.

El sindicato de trabajadores de Monómeros, Sintramonomeros, rechazó rotundamente la posible venta, argumentando que el enfoque de Nitrofert es puramente mercantilista y pone en riesgo la estabilidad laboral de los empleados. En un comunicado, el sindicato señaló que la estrategia del comprador se centra únicamente en los activos de la empresa, ignorando su importancia como motor del agro colombiano.

Monómeros enfrenta una situación financiera delicada, con un pasivo que asciende a 1 billón de pesos colombianos (aproximadamente 250 millones de dólares). Según el superintendente Escobar, esta deuda pone en riesgo la estabilidad de los 1.500 empleados de la compañía.

A pesar de estas dificultades, Monómeros reportó avances significativos en su operatividad. En 2024, la empresa logró un crecimiento del 22% en ventas de fertilizantes y otros productos industriales, alcanzando las 548.680 toneladas métricas. Además, invirtió más de 16.000 millones de pesos en actualizaciones tecnológicas para mejorar su capacidad productiva.

Por su parte, Nitrofert asegura que cuenta con la capacidad financiera para adquirir los activos de Monómeros. En una entrevista reciente, Pacheco afirmó que la empresa alcanzó ventas de 600.000 millones de pesos (aproximadamente 150 millones de dólares) en 2024 y proyecta un crecimiento del 5 % para este año. Sin embargo, el sindicato cuestiona estas cifras y duda de la capacidad de Nitrofert para asumir una transacción de esta magnitud, cuyo valor se estima en 350 millones de dólares.