Emtelco, empresa tercerizadora de servicios participada por EPM y Millicom, enfrenta crecientes denuncias por presuntas irregularidades laborales.
El sindicato Asotraemtelco ha alertado sobre condiciones contractuales precarias, despidos injustificados y posibles vulneraciones a los derechos de los trabajadores.
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El conflicto se intensificó a finales de 2024, cuando varios empleados fueron informados del término de sus contratos con UNE EPM. Aunque se prometió la renovación de los contratos a partir de enero de 2025, las nuevas condiciones salariales ofrecidas representaron una reducción significativa.
Según Jairo Cárdenas, presidente nacional de Asotraemtelco, en entrevista con El Colombiano, trabajadores que antes percibían entre $1.700.000 y $2.100.000 han sido recontratados con el salario mínimo de $1.423.499, complementado con comisiones sujetas a variables inciertas.
Una de las medidas más criticadas es la condición de los pagos al tiempo de conexión efectiva de los empleados, lo que implica que quienes sean desconectados por decisiones administrativas no recibirán remuneración durante ese periodo.
El sindicato considera que esta práctica vulnera los derechos laborales y genera incertidumbre en los ingresos de los trabajadores.
Adicionalmente, los empleados han reportado un aumento en las presiones laborales, metas consideradas inalcanzables y monitoreo constante, lo que según Asotraemtelco, configura un ambiente laboral adverso.
Aunque existe un Comité de Convivencia, el sindicato asegura que los casos de acoso laboral suelen resolverse a favor de la empresa o enfrentan retrasos, según el presidente del sindicato.
Cárdenas también señaló la falta de consideración hacia empleados con condiciones médicas especiales y advirtió sobre la solicitud presentada por EPM y Tigo al Ministerio de Trabajo para autorizar despidos masivos, medida que podría concretarse en 2025 y afectaría a miles de trabajadores.
Ante esta situación, Asotraemtelco ha emitido comunicados, solicitado asesoría jurídica para los empleados afectados y buscado alianzas con otras organizaciones sindicales para coordinar una defensa colectiva. Según el sindicato, estas acciones buscan no solo evitar despidos, sino también garantizar condiciones laborales dignas.
UNE EPM Telecomunicaciones y la solicitud de despido colectivo masivo
UNE EPM Telecomunicaciones le había solicitado al Ministerio del Trabajo la autorización para realizar un despido colectivo masivo, argumentando graves dificultades económicas que comprometen su sostenibilidad operativa. La solicitud, presentada a comienzos de 2025, se enmarca en un contexto de alta competitividad y transformaciones constantes en el sector de las telecomunicaciones.
Según informó la empresa, esta medida responde a razones técnicas, operativas y financieras. En un comunicado oficial, UNE EPM explicó que la reducción de personal forma parte de un plan estructural diseñado para optimizar la gestión y adaptarse a las exigencias del mercado, intensificadas por los avances tecnológicos y la feroz competencia en la industria.
En una carta dirigida a los empleados, la compañía detalló las razones detrás de esta decisión, mencionando que las transformaciones son indispensables para garantizar la sostenibilidad del negocio, aunque implican una reducción en la operación y, por ende, en el personal necesario.
“La compañía ha venido siendo objeto de profundas transformaciones derivadas de la necesidad de adaptarse a las nuevas tecnologías, a las nuevas dinámicas del mercado y a los cambios de los que constantemente es objeto la industria de las telecomunicaciones, transformaciones que resultan indispensables para adaptar la compañía a la nueva realidad haciendo el negocio sostenible y viable. Lo anterior igualmente nos lleva a la necesidad de reducir nuestra operación y, por lo tanto, a requerir menos personal de aquel con el que contamos actualmente”, se explcia en el comunicado.
La solicitud de despido colectivo se fundamenta en el artículo 67 de la Ley 50 de 1990, que regula estos procedimientos en Colombia.
El anuncio se produce en un momento en que el Grupo EPM ejecuta un plan de reestructuración más amplio, que incluye la venta de participaciones en UNE EPM Telecomunicaciones.
En 2023, el Concejo de Medellín aprobó la enajenación de las acciones no controlantes de EPM en UNE EPM y en Inversiones Telco, con el objetivo de concentrar los esfuerzos del grupo en sectores clave como la energía, la gestión del agua y los residuos.
El gerente general de EPM, John Maya Salazar, destacó que los recursos obtenidos de esta venta serán destinados a proyectos de desarrollo territorial. Esta estrategia busca garantizar la sostenibilidad de la organización, alejándose de las telecomunicaciones, un sector que enfrenta grandes desafíos económicos y tecnológicos.
El Ministerio del Trabajo evaluará la solicitud de despido colectivo y determinará si cumple con los requisitos legales establecidos.