El panorama empresarial en Colombia atraviesa un momento crítico. Según datos de Informa Colombia, empresa del grupo Cesce, entre enero y septiembre de 2024 se crearon 164.935 nuevas compañías en el país. Aunque este número podría considerarse muy importante, evidencia una preocupante realidad: se trata del nivel más bajo en la creación de empresas registradas en los últimos cuatro años.
La cifra representa un descenso del 21% con respecto al mismo periodo de 2023, lo que destaca los retos económicos que enfrentan emprendedores y empresarios, según reportó la entidad.
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Los datos tampoco son alentadores en cuanto al cierre de empresas. Durante el mismo lapso, se reportó el cese de operaciones de 183.436 unidades productivas en el país, un incremento del 36% respecto al año anterior. El impacto es notorio, principalmente, en regiones clave como Bogotá, Antioquia, Valle del Cauca y Cundinamarca. Sectores como los servicios administrativos, alojamiento, comida y la explotación de minas y canteras fueron particularmente afectados.
Por supuesto, el cierre masivo en estos sectores refleja graves vulnerabilidades económicas, ya que el aumento de cierres es un indicio de las difíciles condiciones actuales.
Entretanto, uno de los puntos que más discusión genera es el impacto de las restricciones crediticias. A pesar de que el Banco de la República redujo la tasa de interés al 9,75% en noviembre de 2024, las empresas enfrentan dificultades para acceder al financiamiento necesario que les permita adaptarse y mantenerse a flote en el mercado.
Acceso al crédito
Al respecto, el CEO de Cesce Colombia, Juan Carlos Rondón, afirmó que “el acceso al crédito es otro factor crucial en estos momentos. Las restricciones crediticias y la incertidumbre económica han limitado la capacidad de las empresas para financiarse, adaptarse al mercado y mantener una mayor flexibilidad en su liquidez”.
Otro aspecto relevante es el desempeño de sectores específicos de la economía. La explotación de minas y canteras experimentó una contracción significativa del 44%, mientras que las industrias relacionadas con el suministro de electricidad y gas registraron una caída aún mayor del 47%. Esto está directamente vinculado a cambios regulatorios y a la transición hacia energías más limpias, que tienen un impacto profundo en estas áreas estratégicas para la economía nacional.
No obstante, no todo es negativo. Un dato positivo reportado es la disminución de los procesos concursales bajo la Ley 1116 de 2006 (Régimen de Insolvencia Empresarial), que cayeron un 24% en comparación con el tercer trimestre de 2023, lo que quiere decir que alcanzó su punto más bajo en los últimos cuatro años.
Resiliencia de las empresas
La situación podría indicar que las empresas desarrollaron una mayor capacidad de resiliencia ante las condiciones adversas, gracias a factores como la desaceleración de la inflación y la reducción de las tasas de interés. “La disminución en los procesos concursales podría interpretarse como una adaptación rápida de los empresarios en un contexto desafiante”, sostuvo el experto.
Sin embargo, esta resiliencia no es suficiente para contrarrestar las dificultades que enfrenta el tejido empresarial colombiano. La caída tanto en la creación de nuevas empresas como en la sostenibilidad de las existentes exponen la urgencia de intervenir con políticas públicas más robustas que faciliten el acceso al crédito, incentivan la inversión y mejoren el entorno para el desarrollo empresarial.
De igual manera, enfatizó que es necesario actuar rápido para evitar un deterioro mayor en el ecosistema económico del país.
Entorno económico desafiante
Aunque factores como la desaceleración inflacionaria y los esfuerzos por la transición energética tienen cierto impacto para contrarrestar la situación, los datos proporcionados por Informa Colombia dejan claro que el entorno económico sigue siendo extremadamente desafiante. Con un total de 169.070 cierres empresariales registrados entre enero y septiembre de 2024, el contexto refleja la magnitud de los problemas estructurales en diversos sectores de la economía, incluyendo servicios administrativos, salud y actividades económicas dentro de los hogares.
Ante esta compleja situación, las recomendaciones apuntan al fortalecimiento de políticas económicas estratégicas. Tal como advierte el CEO de Cesce Colombia, la flexibilidad en las condiciones crediticias y la adaptación a los cambios regulatorios serán aspectos clave para reactivar la confianza empresarial en Colombia y garantizar mejores perspectivas de crecimiento en los años venideros.