Crecen la indignación y el rechazo por el feminicidio de una mujer mayor en Bucaramanga: se considera el primero del 2025

El acto de extrema violencia que ocurrió en el barrio La Victoria, de Bucaramanga, donde Rosa Ofelia Malagón, una mujer de 61 años, fue asesinada tras ser atacada con un arma blanca por su expareja, un hombre de 71 años que fue capturado en el lugar de los hechos, suma cada vez más rechazo.

En las instituciones distritales y en las entidades defensoras de los derechos de las mujeres, se han levantado nuevas demandas de acción contra la violencia de género.

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El ataque, que tuvo lugar en plena vía pública, expuso una vez más la urgencia de implementar medidas efectivas para proteger a las mujeres en riesgo.

La concejal de Bogotá, Heidy Sánchez Barreto, explicó que Rosa Ofelia Malagón Aguillón “fue perseguida, atacada y asesinada con arma blanca por su pareja, quien le causó por lo menos 10 heridas en tórax y manos. Aunque la víctima de feminicidio corrió pidiendo auxilio, no recibió ayuda, hasta que un motociclista intervino”.

Organizaciones como la Fundación Mujer y Futuro se pronunciaron para denunciar la falta de acciones contundentes por parte de las autoridades.

“Lamentamos y rechazamos el feminicidio ocurrido. Bucaramanga es uno de los municipios más violentos contra las mujeres en el departamento y es por esto que hacemos y reiteramos el llamado a las autoridades para que ejecuten acciones reales y efectivas para la prevención de las violencias y para la protección de la vida de las mujeres”, dijo Dana Gómez, profesional jurídica de la Fundación Mujer y Futuro

“En este caso, pudimos observar, según el relato de los testigos, que la víctima salió a buscar ayuda y la encontró en un desconocido”, agregó.

Esta fundación también enfatizó la importancia de que la sociedad se involucre en la protección de las mujeres en situaciones de peligro.

“Hacemos una invitación a la comunidad para que apoyemos a las mujeres y las socorramos en el momento que piden ayuda. Ningún argumento justifica un feminicidio, ni los celos, ni la rabia, ni la relación y el vínculo que exista entre unas personas, ni la edad de la víctima, ni el victimario, ni la procedencia de la víctima justifica un feminicidio. Ningún argumento justifica un feminicidio, debemos ayudar”, insistió Gómez.

Desde la Alcaldía de Bucaramanga, a través de la Oficina de Mujer y Género, se confirmó que la familia de Rosa Ofelia Malagón está recibiendo acompañamiento psicológico y asistencia institucional. La mujer fue llevada a un hospital de Bucaramanga aún viva, antes de que se confirmara su deceso.

“La @AlcaldiaBGA rechaza el feminicidio de una mujer a manos de su pareja sentimental en el barrio La Victoria. La administración brinda toda la atención psicológica requerida a la familia de la víctima, con base en las rutas de apoyo del #CódigoRosa”, fue el mensaje oficial.

A través de un video, la Alcaldía expresó que “es un caso que nos duele mucho y que desafortunadamente cobra la vida de una mujer de 61 años. Se hace la atención psicológica a los familiares y se les da toda la oferta institucional de las entidades de protección, tales como la Oficina de Mujer, la Gobernación de Santander, Defensoría del Pueblo, Fiscalía y todas las entidades, las cuales estamos muy atentos a hacerle seguimiento y encender las alarmas a partir de este momento para la prevención de la violencia de género”, expresó Anggy Cuadros, representante de la Oficina de Mujer y Género de la Alcaldía.

El crimen dejó en evidencia un largo historial de violencia que la víctima había soportado durante años. Según informó el medio Vanguardia, Rosa Malagón había decidido separarse de su agresor apenas unas semanas antes, el pasado 24 de diciembre de 2024, tras años de maltrato físico, emocional y psicológico.

De acuerdo con la información recopilada por el CTI de la Fiscalía y la Policía, Rosa había tomado la decisión de abandonar a su pareja y buscar refugio en la casa de un familiar.

Sin embargo, el agresor no aceptó la ruptura y continuó acosándola, insistiendo en que regresara con él. Según consignó el medio, la víctima ya había advertido a su hija sobre el comportamiento agresivo de su padre y le pidió que estuviera alerta en caso de que intentara atacarla.

El trágico desenlace ocurrió en la mañana del martes, cuando el hombre contactó a Rosa para que se encontraran en la calle 68 con carrera 15, cerca del lugar donde ella trabajaba como empleada doméstica.

Durante la conversación, que se tornó acalorada, el hombre sacó un cuchillo y la atacó brutalmente. Según detalló el medio santandereano, Rosa intentó escapar corriendo por la cuadra mientras pedía ayuda, pero las heridas resultaron mortales.