El Gobierno de Gustavo Petro enfrenta un escenario económico marcado por tensiones fiscales bastante preocupantes. El riesgo de incumplir la regla fiscal (norma que establece que el límite de deuda es igual a 71% del Producto Interno Bruto -PIB- y el ancla de deuda es igual a 55% del PIB) tomó relevancia debido a múltiples factores, entre ellos, un déficit financiero proyectado para 2024 y un bajo rendimiento en el recaudo tributario.
La situación se agudizó en los últimos meses de 2024, cuando en octubre y noviembre de ese año se prendieron las alertas sobre la sostenibilidad fiscal del país y estas se hicieron más evidentes.
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Ahora, un análisis hecho por la consultora Dapper advierte que las perspectivas económicas se deterioraron, en especial, debido a la caída en la acumulación. En noviembre, se informó que los ingresos tributarios alcanzaron los $249,8 billones, una cifra 5,1 % inferior al mismo periodo del año anterior.
Dicho resultado también queda por debajo de la meta anual establecida por el Gobierno de $279,9 billones. “Esto representa un cumplimiento del 96,2% de la meta acumulada, dejando un déficit de $15 billones frente a las proyecciones iniciales”, explicó el cofundador de esta, José Linares.
Gasto del Estado al alza
Aunque los ingresos fiscales se ven afectados, el gasto del Estado sigue al alza, lo que constituye el principal detonante del desequilibrio. Al respecto, Linares mencionó que el gasto primario aumentó a una tasa real de 9,8% entre enero y agosto. El crecimiento representa una presión adicional para el cumplimiento de las metas fiscales del país.
“Se estima que para cumplir con la regla fiscal sería necesario un recorte adicional de $20,3 billones en el gasto primario. Sin embargo, los esfuerzos realizados hasta la fecha han sido insuficientes para alcanzar el déficit primario proyectado del 0,9 % del Producto Interno Bruto”, agregó el experto.
Por otro lado, el nivel de deuda pública también continúa siendo una fuente de preocupación. La deuda pública alcanzó el 57,76% del Producto Interno Bruto (PIB) en junio de 2024, cifra superior al ancla del 55% establecido por la regla fiscal. La situación no solo incrementa el costo del endeudamiento, sino que también incrementa el riesgo país, ubicándose actualmente en 325 puntos básicos. Según el análisis de Dapper, este último indicador coloca a Colombia como una de las naciones con mayor riesgo en la región después de México.
Implicaciones directas en la economía
La firma destacó que este panorama tiene amplias implicaciones directas para el desempeño de la economía a lo largo de 2025. Argumentan que la combinación de elevados índices de deuda, persistente desequilibrio fiscal y tasas de interés altas complican aún más la posición del país.
En palabras de Linares, “la sostenibilidad fiscal dependerá de medidas de consolidación más efectivas, así como del compromiso del Gobierno para revertir la tendencia de crecimiento del gasto”, una tarea que, en su opinión, deberá ser prioritaria para estabilizar el entorno macroeconómico.
Dapper resalta que la situación actual exige una gestión fiscal más estricta que permita contrarrestar los riesgos a largo plazo.
Gestión fiscal urgente
Sobre esto, el cofundador de la firma remarcó que “este escenario subraya la urgencia de una gestión fiscal más disciplinada que garantice la estabilidad económica y mitigue los riesgos a futuro”. El informe concluye que la viabilidad de cumplir con la regla dependiente de implementar recortes significativos o de asegurar mayores ingresos tributarios en los próximos meses.
Los retos fiscales no son nuevos, pero enfrentan ahora un nivel de presión inédito en las últimas dos décadas —con excepción del año pandémico 2020— y advierten sobre la necesidad de ajustar las políticas públicas para evitar mayores repercusiones económicas para el país.