Hay incertidumbre en Colombia y a nivel global por lo que puede pasar con el dólar en Colombia durante enero y el resto de 2025, dependiendo de diferentes factores, tanto nacionales como internacionales, algo que se ha visto con mayor fuerza en los últimos años y tienen a la divisa en niveles históricos. Por ejemplo, el 3 de enero la moneda cerró en promedio de $4.354,90, ante una caída de $50,6 frente a la Tasa Representativa del Mercado (TRM), que se ubicó en $4.410,50.
Al respecto, hay diferentes proyecciones. Una de ellas es la del equipo de economistas de Scotiabank Colpatria, que proyecta que la divisa en este año se mantendrá en $4.367.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.
En contexto, vale recordar que al cierre de 2024 el dólar en Colombia volvió a vivir importantes lapsos de volatilidad a raíz de la incertidumbre que causaron las diferentes propuestas económicas que impulsó el gobierno de Gustavo Petro en el Congreso de la República en materia pensional, laboral, tributario y de salud (unas con más suerte que otras). Además, pasando por los conflictos internacionales, en particular el que se vive entre Israel y Hamas o el que enfrentan a Rusia y Ucrania; y las elecciones presidenciales en Estados Unidos que ganó Donald Trump e impactó los mercados bursátiles.
Qué viene para 2025
De este modo, en 2025 el precio dólar podría continuar con una senda alcista, sobre todo, si se tiene en cuenta la actual política monetaria y fiscal colombiana, impulsada por las recientes determinaciones del Banco de la República y del Gobierno Petro con relación a las tasas de interés, el gasto público, la inflación y la estabilidad de los mercados.
Según las proyecciones del decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad de San Buenaventura, Héctor Julián Sánchez, en estos primeros meses del año el precio de la moneda estadounidense a nivel nacional seguirá dependiendo en gran parte de factores como la política local, los proyectos que impulse el Legislativo y que serán determinantes en la agenda económica y, en especial, en cómo se pueda atender la incertidumbre que hoy genera en los mercados e inversionistas el manejo de la deuda y el cumplimiento de la regla fiscal (norma que establece que el límite de deuda es igual a 71% del Producto Interno Bruto (PIB) y el ancla de deuda es igual a 55% del PIB).
Así las cosas, señala Sánchez, el precio del dólar está lejos de llegar a los niveles que pronosticó el Gobierno para los inicios de este año, que indicaban que la moneda americana llegaría a una tasa de cambio alrededor de los $4.100.
“Este valor se aleja, y bastante, de las predicciones de los analistas locales, entre ellos los de la Academia, que aún insistimos que la divisa seguirá fluctuando entre los $4.330 y $4.370, por lo menos en lo que corresponde a enero y febrero de 2025, a la expectativa por lo que ocurrirá con la inflación local y el nivel al que puedan seguir bajando las tasas de interés”, indicó el docente.
De hecho, según él, se prevé que el Emisor pueda pisar el acelerador para que baje la tasa de interés (9,5% actual), lo que motivaría la llegada de dólares al país. “No obstante, habrá todavía fuertes incertidumbres políticas que se tendrán que superar, sobre todo por lo que podría significar algunas reformas que aún se tramitan en el Congreso y que afectarían el precio de esta divisa”, insistió.
Proyecciones sobre la moneda
A parte de los pronósticos que hace la Academia, otros informes como el dado a conocer hace poco por el Banco de la República sobre la política monetaria, mostraron noticias poco alentadoras para quienes esperan que el dólar comience a bajar.
El banco central, por ejemplo, prevé que la moneda americana tendría en estas primeras semanas del año un efecto importante sobre la inflación de bienes. “Este último factor, junto con unos precios internacionales más bajos y unas presiones desinflacionarias provenientes de la tasa de cambio real algo mayores a partir de 2025, llevaron a reducir toda su senda de pronóstico”, se lee en un comunicado enviado hace unos días a la opinión pública.
De otra parte, un análisis hecho por el equipo de Investigaciones Económicas de Corficolombiana reveló que la incertidumbre local y global mantendrían el dólar en el país en un promedio de $4.344 durante el primer semestre de 2025, siendo una mayor volatilidad su mayor constante.
Sin embargo, estas predicciones están sujetas a una incertidumbre mayor de lo habitual. Lo anterior, sobre todo, cuando hay todavía reformas clave que están estancadas en un Congreso que ya comenzará a mirar de reojo y con mayor concentración las elecciones presidenciales de 2026, debido a que no hay que pasar por alto que 2025 será un año preelectoral donde se empezará a aclarar el panorama de quiénes aspirarán a suceder al presidente Gustavo Petro en la Casa de Nariño.
Efecto Donald Trump
En cuanto al escenario internacional y su impacto en el precio del dólar, es claro que una resolución de la guerra entre Rusia y Ucrania podría mejorar el ambiente para el comercio internacional. Asimismo, se espera que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, presione para que se bajen más las tasas de interés en la Reserva Federal (FED), que está en 4,5%, y con ello se relaje la inversión externa en todas las economías.
Otro punto que genera riesgo es que se podría generar con las decisiones que tome la administración Trump sobre los aranceles a China, Canadá, México y otros grandes socios comerciales, una práctica que ya llevó a cabo el mandatario en su primer periodo en la Casa Blanca y que puso a tambalear a los mercados.