El caso de Luis Andrés Colmenares, ocurrido el 31 de octubre de 2010, marcó un antes y un después en la vida de la familia Colmenares Escobar. El joven universitario fue encontrado sin vida en un caño del parque El Virrey, al norte de Bogotá, en circunstancias que aún generan debate en la opinión pública. Desde entonces, sus padres y hermano, de raíces guajiras, han enfrentado un proceso largo y complejo de duelo y transformación personal.
14 años después de aquella tragedia, Jorge Colmenares, el hermano menor de Luis Andrés, publicó un mensaje que causó revuelo en redes sociales. Con un tono cargado de emoción, el joven abogado compartió una fotografía tomada en un momento de unidad y celebración familiar, que provocó una gran carga emocional entre sus seguidores y conocedores del caso.
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El 2 de enero, Jorge compartió en su cuenta de X un mensaje en el que expresaba su alegría al ver a su madre, Oneida Escobar, reencontrar motivos para florecer después de años de dolor, tanto por la muerte de Luis Andrés como por las dificultades en la búsqueda de justicia, que aún mantienen viva la esperanza de conocer la verdad.
“Mamá, verte florecer ha sido lo mejor que me pasó en diciembre y lo más lindo de este comienzo de año. Que el 2025 nos siga sorprendiendo. ¡Feliz año para todos ustedes!”, escribió el abogado, acompañado de una imagen donde se le ve sonriente junto a su madre.
Además, en Instagram, Jorge amplió su mensaje, enumerando varios momentos recientes que, según él, fueron significativos en su vida y en la de su familia. Entre estos, destacó: “¡Compartir con el amor de mi vida, mi gorda! (...) Con familia recargando el alma. Volver a lo simple, a lo que me da paz, a mi lugar feliz”.
Ante estas publicaciones, números usuarios de las redes sociales señalaron: “Y seguro que se ve más radiante, Felicitaciones para ustedes como Familia y feliz año nuevo”; “Dios te bendiga mucho. Nunca desampares a tu mamita. Jamas”; “Que belleza ver sonreír nuevamente a tú mamá, se ve hermosa”; “Ella volvio a vivir, y eso esta bien,🙌🙌🙌👏”; “Que bellos!….. sentí alegría 🥹 😍como si estuviera ahí”.
Caso de Luis Colmenares y el papel clave de su madre en la búsqueda de justicia
El caso de Luis Andrés Colmenares, ocurrido el 31 de octubre de 2010, es uno de los más controvertidos en la historia judicial reciente de Colombia. El joven estudiante de la Universidad de los Andes fue hallado sin vida en un canal del parque El Virrey tras asistir a una fiesta de Halloween. Las autoridades inicialmente concluyeron que se trató de un accidente, pero sus padres cuestionaron esta versión, dando inicio a una larga búsqueda de respuestas y justicia, que expuso fallas en los procedimientos judiciales y forenses del país.
Oneida Escobar jugó un papel determinante en el avance y la atención mediática del caso. Su insistencia en que las circunstancias de la muerte de su hijo fueran esclarecidas llevó a una reapertura del caso en 2011, tras la contratación de un equipo de peritos que determinó que las lesiones de Luis no eran compatibles con una caída accidental. Este giro abrió la puerta a nuevas hipótesis, entre ellas la de un posible homicidio.
Escobar, con una postura firme y sin vacilar en su propósito, lideró una lucha constante durante años para que el caso no quedara en la impunidad; su persistencia impulsó investigaciones más profundas, que llevaron a la imputación de varias personas, incluidas Laura Moreno y Jessy Quintero, que estuvieron con Luis la noche de su muerte.
A pesar de los esfuerzos de Oneida Escobar, el proceso judicial estuvo marcado por inconsistencias y decisiones controvertidas. Las acusaciones de encubrimiento, contradicciones en los testimonios y la ausencia de pruebas contundentes generaron un entorno de incertidumbre en torno al caso.
Por ello, emprendió la lucha en el caso de su hijo, aunque el fallecimiento de este tuvo un impacto significativo en su relación de pareja, llevando eventualmente al divorcio. Su historia está marcada por el dolor, la perseverancia y diversas adversidades, siendo su proceso de autosuperación reconocido y valorado por su hijo durante las celebraciones de fin y comienzo de 2025.