Mujer dejó a su pequeño hijo encerrado dos horas en un carro estacionado en centro comercial de Medellín: se fue a comprar helado

El antioqueño Alexander Izquierdo se llevó el susto de su vida, junto a un grupo de compradores, luego de que notara que un menor de, aproximadamente, cuatro años, había sido dejado al interior de una camioneta de placas HNV 982 (de Envigado) en el parqueadero del centro comercial Florida, en Medellín.

Y es que esperó durante un buen rato, para asegurarse de que el niño estuviera bien, pero no fue hasta pasadas dos horas que la madre del menor se presentó en el piso subterráneo.

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“Ya llego la propietaria, imagínense disque estaba comprando un helado ¿Ah? Eso no se hace”, se escucha decir a Izquierdo en la grabación que compartió a través de las redes sociales, a manera de denuncia.

Pero su angustia no terminó al encontrar a la responsable de dejar al niño encerrado; ya que, el menor no parecía haberse movido durante el tiempo que estuvo en el vehículo. Motivo por el que, junto a un grupo de personas, entre ellas el equipo de logística del centro comercial, le rogó que revisara si estaba bien:

“Mujer, fíjese si el niño está vivo. Toque al niño para ver si está vivo, en serio, de verdad.  ¡Es un niño, es su hijo, por Dios!”.

La mujer, contrario de atender a sus suplicas, decidió salir del centro comercial, bajo la amenaza de que habían llamado a la Policía. Y, de momento, se desconoce que ocurrió con el menor y si su familia fue amonestada o instruida sobre por qué es peligroso dejarlo en el carro.

Según la American Academy of Pediatrics, el riesgo de golpe de calor en niños debido a vehículos calientes aumenta significativamente durante los días de temperaturas más altas, que podrían ser más frecuentes debido al cambio climático.

Un niño puede sufrir colapso de sus órganos principales cuando su temperatura corporal alcanza los 104 grados Fahrenheit (40 grados Celsius) y morir si llega a los 107 grados F (41,6 grados C). Incluso cuando la temperatura exterior es de 57 grados F (13,8 grados C), un auto puede calentarse peligrosamente rápido. De hecho, en solo 10 minutos, el interior de un vehículo puede subir más de 20 grados Fahrenheit, y dejar las ventanas entreabiertas o el aire acondicionado encendido no resulta efectivo para evitar un golpe de calor.

El cuerpo de los niños se calienta entre tres y cinco veces más rápido que el de un adulto, lo que los hace particularmente vulnerables. El golpe de calor es la principal causa de muertes relacionadas con vehículos en menores de 15 años, excluyendo los accidentes de tránsito. Esto subraya la importancia de tomar medidas preventivas.

Para evitar esta tragedia, es fundamental implementar ciertas medidas de seguridad. Siempre revise el asiento trasero antes de salir del automóvil para asegurarse de que no queda ningún niño dentro. Coloque objetos esenciales, como su teléfono o cartera, en el asiento trasero como recordatorio. Además, solicite al proveedor de cuidado infantil que lo contacte si su hijo no llega en el horario esperado. Durante cambios en su rutina, como rutas diferentes o cuando otra persona conduzca al niño, esté particularmente alerta para evitar distracciones.

También es importante mantener las llaves del auto fuera del alcance de los niños y enseñarles que los vehículos no son lugares seguros para jugar. Cierre los asientos plegables traseros para que los niños no puedan entrar al maletero desde el interior y recuérdeles que el maletero no es un escondite adecuado al jugar.

Estas acciones pueden marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Según expertos, incluso los padres más amorosos y atentos pueden olvidar a un niño en el asiento trasero, especialmente cuando están bajo estrés o enfrentan cambios en su rutina. La prevención comienza con estar conscientes del peligro y seguir estos simples pero efectivos consejos de seguridad.