La operación Orión, llevada a cabo en 2002 en la Comuna 13 de Medellín (Antioquia), ha sido tema de conversación y de controversia debido a los recientes hallazgos de restos óseos en La Escombrera. De acuerdo con Alejandro Ramelli, presidente de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), las personas que fueron enterradas allí fueron víctimas de la desaparición forzada.
Según la Comisión de la Verdad, la intervención armada de la fuerza pública en la comuna, que buscaba sacar a los integrantes de grupos armados en el lugar, estuvo permeada por un cúmulo de violencias presuntamente ejercidas por las fuerzas oficiales en asocio con grupos paramilitares. De ahí que se hayan registrado desapariciones de civiles, cuyas familias siguen buscándolos.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.
Por eso, desde La Escombrera, anunció que la JEP recogerá los testimonios de más comparecientes. “Nosotros ya hemos llamado a versión voluntaria a 19 agentes del Estado, incluyendo altos mandos militares, como el caso del general Montoya y el general Gallego, que participaron y lideraron la Operación Orión, van a ser llamados otros 10 comparecientes”, indicó.
No obstante, Ramelli aseguró que la JEP no ha atribuido responsables ni temporalidades por el hallazgo de los restos.
En todo caso, en medio de la polémica que generaron los hechos, integrantes de la fuerza pública que estuvieron presentes en la operación contaron su versión. Entre ellos está el soldado profesional Juan Fernando Montoya, que resultó herido en medio de la incursión armada. En entrevista con Teleantioquia, entregó detalles de la confrontación en la que se vio inmiscuido.
“Nosotros llegamos al barrio El Salado en la Comuna 13. Tan pronto nosotros hicimos presencia, de inmediato somos atacados, las ráfagas de fusil, ametralladora”, contó el uniformado al medio citado.
Los combates con las organizaciones armadas perduró por 11 días e implicó la muerte de militares, civiles y milicianos. Y, junto con decenas de personas, el soldado resultó herido: “Yo estoy parado y de momento siento que me pegan los tiros y me desdoblo. Quedo ya fuera de combate”, precisó, contando que tuvo que ser sacado en una puerta que sus compañeros utilizaron como camilla.
En medio de la confrontación, integrantes de los grupos armados ilegales se valieron de cianuro y de materia fecal para generar mayores afectaciones en la salud de los uniformados a los que lograban impactar con sus disparos. “Ese fue mi gran temor en el momento, que los tiros no estuvieran ni cianurados ni tuvieran materia fecal”, explicó el soldado profesional.
Por su parte, el exsecretario de Seguridad de Cali Carlos Javier Soler, que fungió como comandante de la unidad de un pelotón antiterrorista de la Cuarta Brigada del Ejército Nacional, afirmó que la operación Orión se enfocó en aliviar las problemáticas de los habitantes de la comuna. Pues, estaban siendo víctimas de extorsiones.
“Las personas que vivían allí rogaban, imploraban, escribían cartas que firmaban los líderes, al comandante de la Cuarta Brigada, al presidente, a todo el mundo, para que se interviniera (la comuna), porque se les cobraba por vivir”, precisó.
Los integrantes de varios grupos delincuenciales y terroristas no solo mantenían constantes disputas por el control territorial, sino que exigían pagos a todos los ciudadanos: “Le cobraban a la señora que vendía arepitas en la esquina, le cobraban al señor que vendía paletas, al señor que vendía limón, era una extorsión sistemática”, aclaró.
Además, establecieron horarios de entrada y de salida en la zona, los niños eran víctimas de reclutamiento forzado y las mujeres y niñas eran abusadas sexualmente. En consecuencia, se ordenó la intervención armada en la comuna. Pero, el hecho de que se haya llevado a cabo la operación no quiere decir que los cuerpos hallados en La Escombrera correspondan a las personas asesinadas en ella, puesto que diferentes actores armados solían dejar a sus víctimas en esa fosa común.
“La operación Orión fue legítima, contó con órdenes de allanamiento de la Fiscalía, contó con fotos, contó con individualización, contó con un planeamiento desde el Comando General”, dijo.