Una joven colombiana denunció a través de su cuenta de TikTok que fue víctima de agresión física y explotación laboral mientras trabajaba en un restaurante ubicado en Denia, España. De acuerdo con el relato de la afectada, el hecho ocurrió de diciembre en el restaurante Jamse & l’arròs, propiedad de un hombre llamado Jonathan, al que señaló como el agresor.
La denuncia de la joven incluye acusaciones por falta de pago, agresión física y amenazas, por lo que decidió presentarse ante las autoridades locales y no solo denunciarlo ante la ley, sino publicar varios videos de su experiencia, lo que desató todo un debate sobre las condiciones laborales de los inmigrantes en el sector de la hostelería a nivel internacional.
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De acuerdo con el testimonio de Karla Ordoñez, como se identifica la joven en su perfil de redes sociales, todo comenzó cuando decidió ir al restaurante para reclamar el pago de los días trabajados, pues relata que decidió renunciar a su puesto el 12 de diciembre, debido a que cumplía con jornadas que variaban entre las 8 y 12 horas diarias, pero afirma que el propietario se negó a darle el pago correspondiente.
Según explicó, el pago ofrecido por jornadas completas y medias eran insuficientes y contrarios a lo estipulado por la ley laboral española.
Del mismo modo, la joven aseguró que la situación escaló cuando decidió grabar la conversación con su jefe como prueba de su respuesta negativa para pagarle. Sin embargo, en el momento en el que Jonathan se dio cuenta intentó arrebatarle el celular, lo que desató un forcejeo en el que la joven afirma haber recibido un puñetazo en la frente. “Me cogieron pues unos puntos y tenía sangre, pero fue, pues por el puñetazo, pero los morados ya aparecieron desde la tarde desde la tarde de ayer (24 de diciembre)”.
Karla también denunció que, tras el primer golpe, el propietario continuó agrediéndola físicamente, incluso tirándola al suelo y propinándole patadas y golpes antes de que llegara la Policía al lugar; según su testimonio, otros empleados y personas presentes intervinieron para intentar detener la agresión. Después de lo ocurrido, la trabajadora expresó su temor por las amenazas recibidas por parte de su exjefe, que, según ella, le advirtió que podría sufrir represalias más graves.
La denuncia no solo se centra en la agresión física, sino también en las condiciones laborales que, según ella, enfrentan los trabajadores inmigrantes en el sector de la hostelería, pues afirma que conoce a varias personas que han atravesado por jornadas laborales extensas, horas extras no remuneradas y salarios considerablemente bajos en este y otros empleos.
La joven afirmó que ya presentó una denuncia formal ante la policía por agresión, falta de pago y daños psicológicos. Asimismo, indicó que cuenta con un parte médico que respalda las lesiones sufridas y que planea ampliar la denuncia con nuevos informes médicos que documenten los hematomas que se hicieron visibles horas después del suceso.
En su video, la trabajadora hizo un llamado a las autoridades para que investiguen y tomen medidas contra el restaurante Jamse & l’arròs y su propietario, así como contra su otra sucursal, que también está ubicada en Denia. Además, instó a otros trabajadores que hayan sufrido situaciones similares a no quedarse callados y a denunciar los abusos laborales.
Karla aseguró tener residencia legal en el país y destacó que muchos trabajadores no denuncian por miedo a represalias o por encontrarse en situación irregular, lo que los hace más vulnerables a este tipo de prácticas.
La trabajadora también reflexionó sobre el impacto psicológico que este tipo de experiencias tiene en los empleados, señalando que el miedo y la incertidumbre son constantes para quienes enfrentan estas situaciones, por lo que recibió mucho apoyo por parte de los internautas.