En un operativo que puso en evidencia los riesgos latentes en la capital colombiana, la Policía Metropolitana de Bogotá incautó más de 12.000 unidades de pólvora almacenadas en un puesto de venta de tamales en el barrio Casa Linda, ubicado en la localidad de Ciudad Bolívar. Según informó la institución, el hallazgo se produjo durante labores de patrullaje en el marco de la estrategia de seguridad denominada ‘Bogotá Camina Segura’. Este operativo evitó una posible tragedia, y resaltó la necesidad de reforzar las medidas de control en esta época del año.
De acuerdo con el comunicado oficial de la Policía, los agentes identificaron un establecimiento que, a simple vista, funcionaba como un punto de venta de alimentos. Sin embargo, al inspeccionar el lugar, descubrieron varias cajas de juegos pirotécnicos almacenadas cerca de una pipeta de gas, lo que representaba un riesgo inminente de explosión. El teniente coronel Germán Gómez Hoyos, vocero de la institución, detalló que las autoridades procedieron de inmediato a incautar las 12.000 unidades de pólvora, evitando así un potencial desastre en la zona.
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Este no es un caso aislado. Según datos proporcionados por la Policía, durante el mes de diciembre se han decomisado más de 14.000 unidades de pólvora en Ciudad Bolívar, una cifra que refleja la magnitud del comercio ilegal de estos productos en la capital. El uso de pólvora sigue siendo una de las principales preocupaciones de las autoridades.
Según datos de la Secretaría de Salud de Bogotá, hasta el momento se han registrado 100 casos de personas quemadas por manipulación de juegos pirotécnicos en la ciudad durante diciembre. De estos, 34 corresponden a menores de edad, siendo los niños de entre 0 y 5 años los más afectados. En cuanto a los adultos, los jóvenes de entre 18 y 28 años representan el grupo con mayor número de lesiones.
Los artefactos pirotécnicos que más han causado lesiones son los voladores, con 40 casos reportados, seguidos por los totes, con 16, y las luces de bengala, con 8. Las localidades más afectadas por estos incidentes son Suba, Kennedy, Engativá, Ciudad Bolívar y Bosa, lo que evidencia una distribución geográfica amplia del problema en la ciudad.
El subsecretario de Salud Pública, Julián Fernández, hizo un llamado enfático a la ciudadanía para evitar el uso de pólvora, destacando los riesgos que estos artefactos representan para la vida y la integridad de las personas. “No compre, ni para usted ni para sus hijos, luces de bengala, totes, voladores, ninguna clase de pólvora. Quererlos es protegerlos. Ninguno de estos artefactos son inofensivos. La pólvora es peligrosa y una quemadura con este artefacto cambia vidas”, afirmó Fernández, que instó a las familias a celebrar las festividades en un ambiente seguro y libre de riesgos.
El aumento en el número de quemados por pólvora en comparación con el año pasado es alarmante. Mientras que en 2022 se registraron 87 casos para esta misma fecha, en 2023 la cifra ha ascendido a 100, lo que representa un incremento del 14,94%. Este dato subraya la necesidad de reforzar las campañas de concienciación y las medidas de control para evitar que más personas resulten afectadas.
Con la llegada de la celebración de Año Nuevo, las autoridades reiteraron su llamado a la responsabilidad ciudadana. “Nos queda una festividad que celebrar: el Año Nuevo. Nos queda la oportunidad de tener conciencia y pensar en los más pequeños, de ser solidarios con los otros. La pólvora no solo le puede causar una tragedia a usted, sino a un ser querido, a un vecino que esté cerca, a un amigo que lo esté observando. Tenemos como ciudadanos una gran responsabilidad. Ya No Más Pólvora”, enfatizó la Secretaría de Salud.