En la tarde del jueves 26 de diciembre de 2024, un juez de Bucaramanga decretó que Andrés Fabián Soto Niño, más conocido como alias Chorizo –que sería uno de los principales implicados en la guerra por el microtráfico en Santander– permanecería recluido en detención domiciliaria luego de haber sido capturado en noviembre del presente año.
Soto Niño, que sería integrante de la estructura criminal “Los del Sur”, se había posicionado como uno de los criminales más peligrosos de la capital santandereana desde hace meses; sin embargo, para las autoridades, dicho aspecto no habría sido suficiente para que fuera recluido en uno de los centros penitenciarios de la Ciudad Bonita.
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Tal situación generó la incomodidad del alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán, que no fue ajeno a la medida y expresó su inconformidad a través de sus redes sociales.
Fue por medio de su cuenta de X que el también llamado “Bukele colombiano” manifestó su “preocupación” por situaciones de tal índole, que se habrían vuelto repetitivos en la capital santandereana desde hace meses.
“Alias ‘Chorizo, pieza clave dentro de las estructuras criminales de Bucaramanga y el área, fue cobijado con detención domiciliaria en las últimas horas. Como alcalde veo con preocupación que esto se ha vuelto repetitivo con los delincuentes de gran peligrosidad”.
El dirigente bumangués fue claro en que “soy respetuoso de las decisiones judiciales y su autonomía, sin embargo, que actores criminales de tanta complejidad estén en sus casas, es una alerta para toda la región metropolitana, dado su nivel de influencia en las organizaciones delincuenciales”.
Y es que “Chorizo” registra un amplio historial criminal que ha valido para que fuera capturado por las autoridades en dos oportunidades.
Cómo fue la captura de alias Chorizo
Según explicaron los organismos encargados, Soto Niño fue interceptado por las autoridades luego de que arrolló a un policía que le hizo una señal de Alto en el barrio Rincón de Girón del municipio de Girón, en inmediaciones a Bucaramanga, en la tarde del domingo 10 de noviembre de 2024.
El uniformado se percató de que el vehículo, de placas GIW387, transitaba a alta velocidad por una de las vías más transitadas de la zona, razón por la que optó por detener a su conductor; sin embargo, por miedo a ser descubierto, “Chorizo” hizo caso omiso al llamado del policía y lo arrolló.
Una vez embistió al miembro de la fuerza pública, el delincuente intentó escapar de la zona, pero el policía herido llamó a algunos de sus compañeros que lograron localizar a Soto Niño, que permanecía en compañía de su pareja, Dora Alicia Vesga Lagos.
De hecho, según explicaron las autoridades, la mujer intentó sobornar a los uniformados que dieron con el paradero de su novio y llegó a ofrecerles más de $200.000 con el fin de que no hicieran efectiva la captura.
“Nos dijo que nos ayudaba, que nos reconocía para el almuerzo, y si no lo deteníamos nos daba 200 mil pesos. Es así que procedemos de inmediato a darle a conocer sus derechos como persona capturada por el delito de cohecho”, señala el reporte de las autoridades al que tuvo acceso Vanguardia.
Así las cosas, una vez capturado, tanto “Chorizo” como Vesga Lagos fueron dejados a disposición de la Fiscalía General de la Nación por los delitos de violencia contra servidor público y cohecho.
“Este delincuente hacía parte de una estructura criminal. La policía nacional lo captura y, una vez sale de la cárcel, inicia un proceso de reestructuración para comercializar droga en varios sectores de Bucaramanga y su área metropolitana”, aseguró el comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, general Henry Yesid Bello.