El 26 de diciembre, el presidente Gustavo Petro ratificó a través de su cuenta en X el inicio de la construcción del Palacio de Justicia de Medellín, prevista para comenzar en enero.
El mandatario replicó una nota del diario El Colombiano que destacaba el proceso de adjudicación del contrato y el inicio de la obra, la cual tendrá una duración aproximada de 30 meses. Además, acompañó la publicación con el siguiente mensaje: “El gobierno nacional, tras 14 años de espera, construirá el Palacio de Justicia de Medellín. Que la justicia reine en Antioquia y Colombia”.
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En una publicación realizada a inicios de noviembre, el presidente Petro había asegurado que la Agencia Nacional Inmobiliaria Virgilio Barco Vargas estará a cargo de dos proyectos arquitectónicos emblemáticos: un edificio de oficinas en el centro de Bogotá y el nuevo Palacio de Justicia en Medellín.
El edificio, que contará con 28 pisos construidos en un área de 33.948 metros cuadrados en el centro de Medellín, albergará al Tribunal Superior de Medellín, el Tribunal Superior de Antioquia, el Tribunal Contencioso Administrativo de Antioquia y el Consejo Seccional de la Judicatura.
Después de más de una década de retrasos en diseños y planeación, se estableció que la adecuación de los terrenos y los diseños comenzará en enero de 2025, mientras que las actividades específicas de construcción se iniciarán en marzo en la zona de La Alpujarra.
Nicolás Corso, director general encargado de la Agencia Nacional Inmobiliaria Virgilio Barco (Anim), señaló en conversación con medios locales que el proyecto está diseñado para completarse en 30 meses, lo que permitiría que Medellín estrene este moderno edificio judicial en 2027.
El diseño del edificio contempla espacios funcionales como zonas de parqueo, terrazas, y áreas distribuidas según las necesidades operativas. Las plantas inferiores estarán destinadas a la atención de trámites que impliquen mayor afluencia de público, mientras que los pisos superiores albergarán los despachos de los magistrados y las salas de audiencias. En el nivel intermedio del edificio, se habilitarán espacios para que los empleados puedan descansar, consumir alimentos y realizar actividades físicas.
El proyecto también está orientado hacia la sostenibilidad y la eficiencia energética. Según un funcionario del proyecto, Corso, se espera que la obra genere aproximadamente 2.000 empleos directos e indirectos, priorizando el uso de materiales y proveedores nacionales. Además, el diseño busca obtener la certificación LEED Gold, un estándar internacional que garantiza el cumplimiento de criterios rigurosos en sostenibilidad.
El diseño arquitectónico maximizará la entrada de luz natural en los interiores y utilizará materiales y tecnologías que cumplen con normativas sismorresistentes. Esto no solo asegurará un entorno funcional para el personal judicial, sino también una construcción que promueva la sostenibilidad y la eficiencia energética en su operación.
El proyecto del nuevo Palacio de Justicia en Medellín: una década de retrasos y ajustes presupuestales
El Consejo Superior de la Judicatura asumió en 2017 la responsabilidad de un ambicioso proyecto que busca dotar a Medellín de un nuevo Palacio de Justicia, una iniciativa que, pese a su relevancia, ha enfrentado múltiples obstáculos desde su concepción en 2010. Según informó el medio, el proyecto fue incluido en un fideicomiso con recursos destinados a su ejecución, pero los avances han sido limitados, dejando en pausa la obra.
La idea de construir un nuevo Palacio de Justicia en Medellín surgió hace más de una década, cuando el Instituto para el Desarrollo de Antioquia (Idea) destinó $5.583 millones de pesos colombianos para la realización de estudios y diseños preliminares. Además, el instituto cedió un lote estratégico junto al Centro Administrativo La Alpujarra, un lugar clave en el corazón de la ciudad. En 2011 se presentaron los primeros diseños arquitectónicos, los cuales incluían innovaciones como entradas independientes para sindicados y jueces, garantizando que no se cruzaran en ningún momento durante su trayecto hacia las salas de audiencia.