Mujer indígena embera murió tras un accidente de transito cerca de un albergue en Bogotá

Una mujer de 79 años de la comunidad embera murió en un incidente en la calle 80 cerca del albergue UPI La Florida

La muerte de Luz María Estevez de Queragama tuvo lugar en un accidente vial cerca del albergue UPI La Florida, calle 80 en Bogotá - crédito Colprensa y iStock

La comunidad indígena embera, asentada en Bogotá, enfrenta un nuevo golpe tras la muerte de Luz María Estevez de Queragama, una mujer de 79 años que falleció en un accidente vial a las afueras del albergue UPI La Florida, ubicado sobre la calle 80. Este espacio, gestionado por el Distrito, alberga a cerca de 630 personas de esta comunidad, quienes viven en condiciones que han sido calificadas como preocupantes en términos de salubridad y seguridad. La tragedia generó un llamado urgente de las autoridades locales para esclarecer las circunstancias del incidente y reforzar las medidas de protección para esta población vulnerable.

De acuerdo con el comunicado emitido por la Consejería Distrital de Paz, Víctimas y Reconciliación, la Administración Distrital lamentó profundamente el fallecimiento de Estevez de Queragama y expresó su solidaridad con la familia de la víctima y con toda la comunidad Embera. La entidad aseguró que se activaron las rutas de acompañamiento necesarias para brindar apoyo a los afectados. Además, reiteró su compromiso con la protección de los derechos de esta población indígena, que enfrenta múltiples desafíos tras su desplazamiento a la capital.

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El accidente de Estevez de Queragama no es un hecho aislado. Es de mencionar que desde 2021, al menos 47 personas de las comunidades indígenas asentadas en Bogotá han fallecido, incluyendo 36 menores y 12 adultos. Este año, en particular, ha sido especialmente difícil para los Embera, con varias muertes registradas tanto en los albergues distritales como en el Parque Nacional, donde anteriormente se encontraban asentados cientos de indígenas antes de ser trasladados a refugios temporales.

Desde 2021 se han registrado al menos 47 muertes entre las comunidades indígenas asentadas en Bogotá, incluidas 36 de menores de edad - crédito Colprensa

La situación de los albergues que acogen a la comunidad Embera en Bogotá ha sido objeto de preocupación constante. De acuerdo con un diagnóstico realizado en agosto por la Unidad para las Víctimas, se estima que alrededor de 2.221 personas de esta comunidad se encuentran distribuidas en tres albergues principales: La Rioja, que alberga a 241 hogares con 576 personas; La Florida, con 244 hogares y 629 personas; y El Buen Samaritano, que acoge a 60 personas. De esta población, el 56,3% son niños y niñas, lo que subraya la vulnerabilidad de los menores en este contexto.

El retorno de más de 800 indígenas que anteriormente se encontraban en el Parque Nacional marcó un intento por mejorar las condiciones de vida de esta comunidad, pero los desafíos persisten. La Consejería Distrital enfatizó que se llevarán a cabo las acciones necesarias para esclarecer las circunstancias del accidente que cobró la vida de Estevez de Queragama e identificar a los responsables. Asimismo, reiteraron su compromiso de trabajar en la protección y el acompañamiento de la población embera mientras permanezca en la ciudad.

La muerte de Luz María Estevez de Queragama pone nuevamente en evidencia las dificultades que enfrentan las comunidades indígenas desplazadas en Bogotá, atrapadas en un entorno urbano que no siempre garantiza su seguridad ni respeta sus derechos fundamentales. La Administración Distrital, según lo informado, continúa trabajando en estrategias para resarcir a esta población ancestral, aunque los retos son significativos y las soluciones, hasta ahora, insuficientes.

Tres albergues distritales en Bogotá acogen a la comunidad emberá, con más de 2.221 personas, de las cuales el 56,3 % son menores de edad - crédito Colprensa

Aumentan las muertes de peatones y motociclistas en Colombia

El exceso de velocidad, la desobediencia a las señales de tránsito y el mal estado de las vías fueron identificados como los principales factores detrás de los accidentes de tránsito en Colombia durante 2024. Según cifras de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, hasta noviembre de 2024 se registraron 7.396 siniestros viales en el país, con un saldo preocupante de 1.654 peatones fallecidos. Aunque el número total de víctimas mortales disminuyó en comparación con 2023, el incremento en las muertes de peatones y mujeres motociclistas evidencia que los esfuerzos por mejorar la seguridad vial aún son insuficientes.

De acuerdo con la información proporcionada por la Ansv, los motociclistas continúan siendo el grupo más afectado, representando aproximadamente el 60% de las víctimas mortales en accidentes de tránsito. Este año, se destacó un alarmante aumento en las muertes de mujeres motociclistas, con un promedio de una fallecida cada 12 horas. Por su parte, los peatones, quienes constituyen el segundo grupo más vulnerable, enfrentan riesgos tanto por su propia imprudencia al cruzar las calles sin precaución como por el descuido de conductores de automóviles y motocicletas.

Hasta noviembre de 2024, Colombia registró 7.396 siniestros viales con un saldo de 1.654 peatones fallecidos, según la Agencia Nacional de Seguridad Vial - crédito iStock

En contraste, los conductores y pasajeros de automóviles presentan cifras significativamente menores de siniestralidad. Hasta la fecha de corte, se reportaron 815 muertes en este grupo, lo que equivale al 11% del total de víctimas. Este dato refleja una ligera disminución respecto a las 821 muertes registradas en 2023, aunque la reducción es mínima.