Alias Chito, cabecilla de las disidencias de las Farc, recordado por solicitar la decapitación de integrantes del Ejército Nacional en mayo de 2024, es señalado de enterrar en una fosa común a 40 jóvenes en el Cauca.
La información de la presencia de 40 cuerpos en una fosa común fue suministrada por una guerrillera capturada en un bus en el municipio de Balboa, de acuerdo con Semana.
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Alias Chito habría ordenado sepultar a combatientes de la estructura Carlos Patiño, quienes cayeron en combate contra el Ejército Nacional en la vereda Bolivia de Argelia. En estos combates murieron tres uniformados.
Federico Mejía, comandante de la Tercera División del Ejército, informó que la guerrillera sobrevivió a los combates en la vereda, donde escuchó a las directrices de las disidencias de las Farc de los 40 jóvenes sepultados.
“Esa señora contó cómo alias Chito, cuando los guerrilleros trataban de huir porque los soldados atacaron bastante fuerte, el tipo mataba a sus propios guerrilleros; a todo el que se devolvía le pegaba un tiro. A todos los enterraron en una fosa”, indicó el general Federico Mejía.
Semana también reveló la existencia de otras dos fosas comunes, donde habrían terminado menores de edad que fueron reclutados de forma forzosa por el grupo guerrillero.
El caso más conocido en Colombia fue el de los diez jóvenes, quienes trataron de escapar de las filas de las disidencias de las Farc lideradas por Iván Mordisco, pero un hombre los regresó a la guerrilla.
“Los formaron frente a sus compañeros y los fusilaron. Uno logró escapar con una herida de bala y fue rescatado en el municipio de Balboa, donde contó la historia. Los demás fueron enterrados en una fosa común en el cañón del Patía”, indicó el general Mejía.
La persona que logró sobrevivir le manifestó al citado medio lo siguiente: “Yo no sé cómo sobreviví, eso fue un milagro. Así herido caminé por cuatro días más, lo hacía solo por el monte y no me dejaba ver de la gente, porque allá no se puede confiar en nadie, la mayoría pertenece a la guerrilla”.
Organigrama criminal de la estructura Carlos Patiño
La estructura Carlos Patiño tiene presencia delictiva en el Cañón del Micay, específicamente en Argelia, corregimiento de El Plateado (recientemente atacado por drones y donde se lleva a cabo la Operación Perseo), El Tambo y López de Micay.
A pesar de que las disidencias de las Farc son lideradas por Iván Mordisco, la estructura Carlos Patiño también cuenta con sus propias cabezas criminales, donde destaca Anderson Andrey Vargas, alias Kevin. Las autoridades ofrecen una recompensa de hasta 130 millones de pesos por él.
Quien le sigue en la estructura criminal se encuentra alias ‘Gafas’, conocido por ser el carcelero de Ingrid Betancourt durante su secuestro (2002-2008).
La otra persona al mando de la estructura Carlos Patiño es alias Janer, quien es señalado de ser el encargado de los negocios ilegales de la organización en El Tambo, Rosas y La Sierra. La persona que sigue es alias Farley, encargado de San Juan de Micay.
Entre los tres principales cabecillas de la estructura criminal se encuentra alias ‘Dumar’, señalado de ser un sanguinario delincuente, quien al parecer habría ordenado decapitar a militares por no llevarlos prisioneros y ordenar además atentados terroristas en la región.
Entre los otros cabecillas figuran alias Giovanny Armero, señalado de asesinar a un niño en El Plateado, alias Jeison, abatido en 2022 por el Ejército Nacional; alias Pablo y Gringo.
Las tropas que participaron en la operación Perseo realizaron una verificación exhaustiva de las vallas para determinar si contenían artefactos explosivos improvisados antes de proceder con su desmonte y destrucción. Esta acción fue llevada a cabo con la máxima precaución, dada la amenaza que representan los explosivos utilizados por los grupos ilegales en estas zonas.
La intervención no se limitó únicamente al desmonte de las vallas. Como parte de las medidas de seguridad, se han implementado puestos de control en las vías de acceso al corregimiento para restringir el ingreso y la movilidad de los grupos armados ilegales. Además, se realizan patrullajes constantes, tanto diurnos como nocturnos, en las partes altas del corregimiento, lo que permite vigilar zonas estratégicas y prevenir cualquier intento de reagrupación o replanteamiento por parte de los disidentes.