El ministro de Relaciones Exteriores de Colombia, Luis Gilberto Murillo, anunció a través de su cuenta oficial de X que el gobierno japonés ha realizado una donación de tres millones de dólares para apoyar la respuesta humanitaria a los desafíos migratorios que enfrenta el país.
El canciller Murillo resaltó que la vida, la dignidad y los derechos humanos son prioridades en la política pública de Colombia.
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La contribución será implementada en coordinación con la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) y tiene como objetivo fortalecer las capacidades del país para atender a personas migrantes, tanto en su tránsito como en su establecimiento en el territorio nacional.
“La vida, la dignidad y los derechos humanos de las personas siempre estarán en el centro de nuestra política pública. En nuestro compromiso por garantizar una respuesta humanitaria eficiente frente a los desafíos de la migración, agradecemos al gobierno de Japón (@JapanEmb_Col) su generosa donación de 3 millones de dólares”, indicó el canciller Murillo.
El alto funcionario del Gobierno Petro indicó que apoyo económico permitirá promover la inclusión económica de unas 128.000 personas, contribuyendo a su transformación social y económica.
Esta iniciativa refuerza el compromiso de Colombia con una gestión migratoria centrada en la protección de derechos humanos y el acceso a oportunidades para quienes enfrentan condiciones adversas.
“Este apoyo, que se articulará con (@ACNUR_es) nos permitirá fortalecer nuestra capacidad como país de tránsito y origen, promoviendo la inclusión económica de 128.000 personas y contribuyendo a su transformación social y económica”, expresó Luis Gilberto Murillo.
La relación entre Japón y Colombia se ha caracterizado por una cooperación sostenida en diversos ámbitos, y esta donación resalta los esfuerzos internacionales por atender los flujos migratorios en América Latina, donde millones de personas buscan alternativas frente a crisis económicas, políticas y humanitarias en sus países de origen.
Con este respaldo, Colombia avanza en su rol como país de tránsito y destino en el contexto migratorio regional, implementando soluciones que buscan no solo atender las necesidades inmediatas, sino también fomentar la integración y la estabilidad a largo plazo de las comunidades afectadas.
A la donación del Gobierno de Japón, se suma la entrega de diez toneladas de equipos eléctricos, alimentos y medicinas por parte del Gobierno colombiano a Cuba, realizado el pasado sábado 21 de diciembre de 2024. La iniciativa busca respaldar al pueblo cubano tras los estragos causados por los huracanes ‘Oscar’ y ‘Rafael’ durante este año.
El cargamento fue transportado por un avión de la Fuerza Aérea Colombiana, reflejando el esfuerzo conjunto de instituciones gubernamentales, la sociedad civil y el sector empresarial colombiano.
La delegación colombiana estuvo encabezada por el viceministro de Relaciones Exteriores, Jorge Rojas Rodríguez, y el Ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho. Al llegar a La Habana, fueron recibidos por la viceministra de Relaciones Exteriores de Cuba, Josefina Vidal Ferreira, y otros representantes del gobierno cubano.
Esta acción solidaria es parte del programa de ayuda internacional promovido por el canciller colombiano, Álvaro Murillo, para apoyar a países afectados por desastres naturales. Además de Cuba, iniciativas similares han beneficiado a naciones como Haití.
Según la Cancillería de Colombia, la ayuda reafirma el compromiso del país con la cooperación internacional y la asistencia en situaciones de emergencia humanitaria, especialmente hacia comunidades vulnerables en la región.
Los huracanes ‘Oscar’ y ‘Rafael’ dejaron importantes daños en infraestructura y afectaron a miles de personas en Cuba, lo que ha llevado a una respuesta internacional para mitigar los efectos de estos fenómenos climáticos. La entrega de esta donación es un gesto de solidaridad y apoyo en momentos de dificultad.
La cooperación entre ambos países fortalece los lazos históricos entre Colombia y Cuba, destacando la importancia de la ayuda mutua frente a los retos que plantean los desastres naturales en el Caribe y América Latina.