En un mensaje publicado en su cuenta de X, el senador Miguel Uribe Turbay, perteneciente al partido Centro Democrático, criticó la gestión económica del Gobierno de Gustavo Petro y planteó dudas sobre el manejo de los recursos públicos en sus propuestas fiscales de la administración, como la caída reforma tributaria, también conocida como la ley de financiamiento.
El comentario de Uribe Turbay surge después de que la Contraloría denunciara la necesidad de que el Gobierno realice ajustes fiscales tanto en el recaudo como en la ejecución, que se encuentran por encima del 70%. La entidad advirtió que hay un riesgo de perder $96 billones debido a la baja ejecución de los recursos. Según el senador, existe una aparente inconsistencia entre los recursos disponibles y las prioridades de gasto que dice la administración actual.
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Miguel Uribe Turbay señaló en su red social que: “En las matemáticas del Petrismo los $100 billones que tienen sin ejecutar no alcanzan para nada, pero los $10 billones de la hundida reforma tributaria servían para financiar todo”.
¿A qué se refiere el congresista?
La decisión del Congreso de archivar la reforma tributaria propuesta por el Gobierno provocó un debate político y técnico que incluye las preocupaciones expresadas por la Contraloría General de la República. Según cifras preliminares con corte a noviembre de 2024, la entidad de control fiscal expuso inquietudes relacionadas con la ejecución del presupuesto nacional, el recaudo tributario y la sostenibilidad financiera del país.
El presidente Gustavo Petro, tras la negativa del Legislativo a aprobar la reforma tributaria, atribuyó esta decisión a intereses políticos de los congresistas, lo que dejó de lado el análisis técnico. La entidad, por su parte, señaló que el país enfrenta importantes retos fiscales y presupuestales que deben abordarse de manera prioritaria para garantizar la estabilidad económica.
Cifras del recaudo tributario y la caída de ingresos
El ente de control destacó que, a noviembre de 2024, el recaudo total neto ascendió a $369,74 billones; sin embargo, los ingresos tributarios, que constituyen la principal fuente de financiación del presupuesto, solo alcanzaron los $227,41 billones, lo que representa el 72% del aforo vigente de $315,86 billones, de acuerdo con la información que logró obtener el diario El Tiempo.
De acuerdo con el análisis de la Contraloría, dos factores explican parte de esta disminución:
- La reducción en el impuesto de renta, cuyo recaudo cayó un 18%.
- La disminución de los impuestos externos, que representaron una pérdida de $2,29 billones.
El impacto de estas caídas en el recaudo llevó a que el Gobierno enfrente presiones adicionales para financiar su presupuesto, el cual ya arrastra un déficit de $12 billones tras la no aprobación de la reforma tributaria.
Ejecución presupuestal más baja en cinco años
La ejecución presupuestal también fue objeto de análisis por parte de la Contraloría. Hasta noviembre, el porcentaje de ejecución alcanzó solo el 71,1%, una cifra considerada baja en comparación con años anteriores y similar a la registrada en 2020 durante la pandemia.
Entre los rubros analizados, se destacó lo siguiente:
- Gastos de funcionamiento: Se ejecutaron $233,67 billones, lo que corresponde a los compromisos básicos del Gobierno.
- Deuda pública: Se destinó $79,7 billones al cumplimiento de obligaciones financieras.
- Inversión: Este rubro, clave para las reformas sociales del actual Gobierno, muestra un bajo nivel de ejecución, con apenas $44,83 billones de los $100,06 billones asignados.
La Contraloría advirtió que, de mantenerse este ritmo, podría perderse un total de $96,87 billones en recursos no utilizados al cierre de 2024. Además, alertó sobre el posible aumento de las reservas presupuestales, las cuales podrían alcanzar $33,6 billones, dificultando la ejecución efectiva de los proyectos planeados.