El programa Mi Casa Ya, que ha beneficiado a miles de familias en Colombia, enfrenta un momento crítico tras la suspensión de nuevas postulaciones para 2024.
El Ministerio de Vivienda decidió cerrar temporalmente la plataforma para el registro de preasignaciones de vivienda de interés prioritario y postulaciones al subsidio familiar, debido al agotamiento de cupos disponibles para coberturas a la tasa de interés de créditos hipotecarios.
Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel.
Esta medida ha generado preocupación en el sector de la construcción y entre los potenciales beneficiarios del programa.
Guillermo Herrera, presidente de Camacol (Cámara Colombiana de la Construcción), expresó su desconcierto ante la decisión, calificándola como una de las peores noticias económicas del año.
Herrera destacó que la suspensión afectará a 40.500 hogares, principalmente de los estratos 1, 2 y 3, que esperaban acceder al subsidio en 2024 y 2025. El directivo criticó la falta de una transición adecuada y señaló que la medida es incoherente con los esfuerzos de reactivación económica del país, según Semana.
El Ministerio de Vivienda justificó la suspensión como una medida de responsabilidad fiscal, argumentando dificultades en la cuota de inversión del presupuesto 2025, tras el hundimiento de la ley de financiamiento.
El gobierno asegura que los hogares que ya tienen asignado el subsidio y las coberturas a las tasas de interés mantendrán sus beneficios. Además, las familias en estado de preasignación conservarán la reserva de un cupo de subsidio, siempre que cumplan con los requisitos y haya disponibilidad presupuestal, según lo explicó El Espectador.
A pesar de la suspensión, el Ministerio de Vivienda está explorando alternativas para continuar apoyando a las poblaciones vulnerables.
Según detalló el medio mencionado, se están impulsando mecanismos con formas asociativas y cooperativas del sector para ofrecer soluciones adicionales al subsidio familiar. Además, el gobierno planea seguir gestionando fuentes de financiación para impulsar la política de gestión integral del hábitat y vivienda, como establece el Decreto 1470 de 2024.
El impacto de la suspensión del programa Mi Casa Ya se suma a un panorama complejo para el sector de la vivienda en Colombia. Según datos de la Superfinanciera, entre septiembre y noviembre de 2024 se desembolsaron 7,6 billones de pesos en créditos hipotecarios, un aumento del 29% respecto al mismo periodo del año anterior.
Sin embargo, las ventas de vivienda, especialmente de interés social, han mostrado una recuperación desigual. Galería Inmobiliaria reportó un crecimiento del 53% en las ventas de vivienda de interés social prioritario entre enero y noviembre de 2024, en comparación con el mismo periodo de 2023.
A pesar de este crecimiento, las ventas generales de vivienda experimentaron una caída del 15,6% en septiembre de 2024, lo que sugiere un cierre de año similar al de 2023, con niveles de construcción y ventas significativamente por debajo de los observados en 2022. Camacol ha instado al gobierno a revisar las políticas adoptadas y a tomar decisiones técnicas que promuevan la reactivación económica, asegurando los subsidios necesarios para el próximo año y evitando distorsiones en los costos de construcción.
El programa Mi Casa Ya ha sido fundamental para muchas familias en Colombia. Hasta 2024, el gobierno ha beneficiado a 124.047 familias con una inversión superior a los 3,7 billones de pesos
Entre los beneficiarios se encuentran hogares clasificados en el Sisbén IV en grupos de pobreza extrema, moderada y vulnerabilidad, así como madres cabeza de familia y víctimas del conflicto armado. La reciente decisión de suspender nuevas postulaciones plantea un desafío significativo para el acceso a la vivienda en el país, en un contexto donde la estabilidad económica y social es crucial.