María del Pilar Pasos Rodríguez y Jorge Emilio Carranza Díaz, dos civiles residentes en el departamento de Córdoba, recibieron medida de aseguramiento carcelario impuesta por un juez de control de garantías de Montería. Ambos están señalados de tener vínculos con la estructura criminal del Clan del Golfo y de representar un peligro para la comunidad.
Además, cuatro uniformados del Ejército fueron cobijados con prisión domiciliaria, ya que desde 2022 no se ha podido comprobar que mantengan vínculos activos con este grupo armado. Sin embargo, su relación previa permitió al Clan del Golfo ejecutar operaciones que afectaron a las comunidades en la región.
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A los militares Royer de Jesús Pacheco Durango, Ferney Obando Rodríguez, Eder Andrés Reyes Martínez y Miguel Ángel López Viveros se les impuso el uso de brazaletes electrónicos para monitorear su ubicación. Asimismo, se les prohibió regresar a cualquier unidad de la institución militar.
El juez determinó que “la Fiscalía solo logró acreditar que la vinculación con el Clan del Golfo finalizó en 2022 y, en la actualidad, no hay evidencia de que sigan proporcionando información de manera permanente a miembros del grupo armado organizado”.
Entre 2021 y 2022, los uniformados alertaron a la subestructura Uldar Cardona Rueda del Clan del Golfo sobre las actividades y movimientos de la Fuerza Pública en el municipio de Ayapel, Córdoba, según reportó W Radio.
Aunque los uniformados continúan vinculados al proceso judicial por el delito de concierto para delinquir, no aceptaron los cargos imputados.
Capturan a dos colaboradores de “Iván Mordisco” en Popayán
En un reciente operativo, alias Anthony, conocido como El Pastuso, y alias Montalvo fueron detenidos en Popayán. Según informó Caracol Radio, los capturados están vinculados con las disidencias de las FARC lideradas por “Iván Mordisco” y enfrentan acusaciones por planear un atentado contra un Comando de Atención Inmediata (CAI) en la capital del departamento del Cauca.
El coronel Jhon Fredy Zambrano confirmó que, en julio de 2022, los detenidos intentaron detonar una camioneta cargada con 176 barras de indugel en el barrio La Estancia, en la Comuna 3 de Popayán. Este ataque frustrado fue parte de las actividades de inteligencia y vigilancia realizadas para el frente Carlos Patiño.
Tras su captura, alias Anthony y alias Montalvo fueron presentados ante un juez de control de garantías, quien les dictó medida de aseguramiento carcelario. Los delitos imputados incluyen concierto para delinquir con fines de terrorismo y porte de estupefacientes. Además, se les señala de distribuir panfletos del grupo armado en el occidente de Popayán, lo que evidencia su activa participación en actividades ilícitas.
Durante el proceso de legalización de captura, se reveló que uno de los detenidos ya estaba bajo investigación por el delito de reclutamiento de menores de edad, un dato que agrava aún más las acusaciones en su contra, según lo reportado por Caracol Radio.
La captura de estos dos individuos supone un golpe significativo para las disidencias de las FARC en la región, particularmente para el frente Carlos Patiño, conocido por su participación en diversas actividades delictivas. Las autoridades continúan trabajando para desarticular estas estructuras criminales y prevenir futuros atentados que pongan en riesgo la seguridad de la ciudadanía.
Este tipo de operaciones generan contundentes golpes a las organizaciones criminales tanto de inteligencia como financieros, pues informaciones suministradas que se han filtrado y el fallido intento de algunos atentados en contra de la población civil y la Fuerza pública los han dejado en evidencia.
Este tipo de grupos han recobrado la fuerza en varios de los territorios del país, por lo que las autoridades ampliaron y fortalecieron estrategias en su contra para evitar la toma en su totalidad de algunos territorios.