Preocupado por la salud de los “peluditos” en el fin de año, el actor Elkin Fajardo advirtió a otros dueños de mascotas sobre una oleada de virus respiratorios que estarían afectando a los animales domésticos en Bogotá.
Según dijo a través de su perfil en la plataforma TikTok: “En Bogotá hay un pico de tos y por eso estamos con Orionsito haciéndonos las nebulizaciones. Así que cuiden mucho a sus perritos, sobre todo cuando están oliendo mucho el pasto o cuando van al colegio”.
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Junto a su fiel amigo, Orión, el también creador de contenido, tuvo que asistir a consulta veterinaria y tras un diagnóstico, no del todo alentador, le recetaron nebulizaciones en casa:
“Mi Orión, a pesar de ser el más juicioso de todos, tiene los pulmones bien afectados, entonces, traten siempre de que sus perros no huelan tanto el pasto, sobre todo en esta época, donde hay un pico, para que no se les enfermen”.
Sin embargo, son varias las medidas para evitar que su mascota enfermé, de encontrarse en Bogotá. Según recomendó la médico veterinaria Angie Manrique, “de manera preventiva, se puede: 1. Manejar el engystol 2. Evitar corrientes muy fuertes de frío y, si es necesario, usar saquitos e impermeables en días de lluvia”.
La pólvora: otro agente externo del que hay que proteger a las mascotas en la temporada de fin de año 2024
En la temporada de fin de año, decenas de hogares enfrentan la angustia de ver a sus mascotas sufrir a causa de los estruendos provocados por los fuegos artificiales, a pesar de que las autoridades en varios países han implementado restricciones al uso de la pólvora. Los efectos de este ruido sobre los animales de compañía son profundos y, en algunos casos, fatales, según expertos en salud animal.
Esteban Bravo, veterinario de la Cruz Roja Bogotá, explicó en entrevista con Infobae Colombia que, aunque las explosiones de la pólvora no siempre causan la muerte inmediata de los animales, pueden generar un daño considerable. “El miedo lo pueden manifestar de diversas maneras, como agresividad o lo que se conoce como entumecimiento emocional, donde los animales se aíslan, tiemblan y presentan una ansiedad severa”, señaló Bravo. Esta ansiedad, explicó, eleva los niveles de cortisol en el cuerpo de los animales, lo que puede ocasionar problemas físicos graves, como infartos, en casos extremos.
El problema es aún más grave si se tiene en cuenta que los animales, especialmente perros, gatos y aves, tienen un sentido auditivo mucho más desarrollado que los seres humanos, lo que los hace más sensibles a los ruidos fuertes. Ángelo Torres, educador canino de la Cruz Roja Bogotá, detalló que los animales tienen un oído selectivo, lo que significa que pueden oír frecuencias mucho más altas. Esto hace que los ruidos producidos por la pólvora sean aún más perturbadores para ellos. “Un perro puede estar durmiendo mientras se enciende una aspiradora, pero si escucha el crujido de un paquete de galletas, inmediatamente se despertará y reaccionará”, explicó Torres.
Para ayudar a los animales a sobrellevar el estrés causado por el ruido de la pólvora, los expertos sugieren una serie de medidas. Una de las recomendaciones es acostumbrar a los perros al sonido de la pólvora de forma gradual, reproduciendo grabaciones de explosiones a bajo volumen mientras se les motiva con juegos y alimentos. Según Torres, con solo dos o tres días de entrenamiento, las mascotas pueden comenzar a adaptarse a los ruidos, lo que les permite enfrentarlos con menos ansiedad durante las festividades.
No obstante, en caso de que no haya tiempo para entrenar a las mascotas, Torres aconseja ubicar a los animales en un lugar tranquilo y aislado del ruido, como una habitación alejada de las ventanas, y proporcionarles una cama y cobijas oscuras para que se sientan más seguros. Además, se debe evitar dejarlos solos, ya que la sensación de soledad puede agravar el estrés.
Esteban Bravo también sugirió que, en situaciones extremas, como crisis de ansiedad que puedan derivar en convulsiones, los propietarios deben mantener la calma, registrar la duración de los episodios y buscar atención veterinaria. Además, alertó sobre el uso de elementos como algodones o tapones en las orejas de los animales, ya que pueden provocar complicaciones en su salud auditiva.