Germán Vargas Lleras se despachó contra Gustavo Petro por su política exterior y llamó “pusilánime” al canciller

Por medio de un fallo del Consejo de Estado, se cayó el nombramiento de Juan Pablo Castro Morales como consejero en la Embajada de Colombia en Francia. Pues, según el máximo juez de la administración pública, hubo irregularidades en dicha designación, puesto que había otros funcionarios de carrera diplomática disponibles para ocupar el cargo.

De acuerdo con el documento del Consejo de Estado, los funcionarios de carrera deben priorizarse para las vacantes y, en este caso, había dos personas disponibles: Ángela María De La Torre Benítez y Constanza Lucía Sánchez Gómez. Ellas habían pedido un traslado a otra sede, pero no les fue permitido.

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El presidente Gustavo Petro se refirió a la decisión del juez de la administración pública, indicando que se está desmantelando su derecho constitucional a tomar decisiones y dirigir su política exterior. De igual manera, indicó que se está perjudicando el servicio exterior que presta Colombia, debido a que se estarían duplicando los costos de traslados de funcionarios a otros países.

“Si ya un funcionario de carrera fue enviado a un país extranjero con alto costo para el estado, no hay razón para permitir que a los 12 meses de llegar pueda escoger irse a otro lugar en el extranjero que queda disponible, con cargo al estado, otra vez, por sus gastos de traslado”, precisó el jefe de Estado en su cuenta de X.

El exvicepresidente Germán Vargas Lleras cuestionó al primer mandatario por su comentario con respecto al fallo del Consejo de Estado, poniendo en duda su política exterior. Según escribió en su cuenta de X, su Gobierno ha evidenciado tener problemas en la materia, como por ejemplo, en el establecimiento de tarifas. Además, afirmó que se estarían utilizando influencias para la designación de ciertas personas en cargos para los cuales no serían idóneos.

“Petro ¿Cuál política exterior? Lo único que han hecho es regalar pasaportes, bajan la tarifa por debajo del costo de producción y crean misiones innecesarias para nombrar a sus amigotes como el caso de Mendoza en Tailandia. Todo con la complicidad del pusilánime Canciller Murillo”, sostuvo el exfuncionario.

El caso de Daniel Mendoza generó una fuerte controversia en redes sociales y en el mismo Gobierno debido a publicaciones en redes sociales que en su momento hizo el escritor y abogado, en las cuales hace afirmaciones sexistas, misóginas y que aluden a delitos sexuales en contra de mujeres y menores de edad. A pesar de eso, el presidente Gustavo Petro pensaba nombrarlo embajador de Colombia en Tailandia.

Aunque el polémico creador de la serie Matarife intentó defenderse de los señalamientos en su contra, asegurando que todos sus comentarios corresponden a apartados de una obra literaria propia, se mantuvieron los cuestionamientos.

Fue tanta la indignación, que más de 100 personalidades, entre congresistas, periodistas y exfuncionarios de otros gobiernos, enviaron una misiva al ministro de Relaciones Exteriores, Luis Gilberto Murillo, para que reconsiderara la elección de Mendoza para el cargo. “Sus publicaciones en redes sociales agreden cualquier principio de respeto a las mujeres y principalmente a las menores de edad. Sus cometarios agresivos y obscenos normalizan el abuso a las menores de edad, ofenden a las víctimas y sus familias y atentan contra el compromiso del Estado contra los delitos más dolorosos para cualquier sociedad”, aseguraron.

Luego de la ola de críticas, el escritor decidió rechazar el puesto, bajo el argumento de que el cargo podría convertirse en una “prisión” para él, que se ha dedicado a hacer denuncias de carácter político y judicial. Su serie Matarife es un ejemplo de ello; en ella denunció presuntos nexos del expresidente Álvaro Uribe con paramilitares.

“Allá en Bangkok, me espera una deliciosa embajada a la que decidí dejar plantada, porque todo este tsunami de ataques me hizo volver el tiempo atrás a mis motivos y razones al por qué lo hice todo así será mi conmigo mismo y entender que aceptar esa embajada repleta de lujos, me obligaba a enterrar mis gritos, mi rabia y mi dolor a dejar la producción de la nueva serie que fui a filmar a Bangkok ciudad de la que me enamoré perdidamente”, indicó.