En la tarde del sábado 14 de diciembre de 2024, los delegados del Gobierno del presidente Gustavo Petro y los representantes del grupo guerrillero Coordinadora Nacional Ejército Nacional anunciaron que llegaron a una serie de acuerdos, con el propósito de frenar las acciones violentas que se presentan contra la fuerza pública y la población en general del sur del país.
En un comunicado presentado a la opinión pública, amas delegaciones ratificaron su compromiso de búsqueda de paz en el territorio nacional, así como avanzar en varios puntos como las transformaciones territoriales y el fortalecimiento de la autonomía de las comunidades en el territorio.
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Inicialmente, se acordó la elaboración de un programa piloto para el tránsito a economías lícitas, lo que implica la reducción de 3.000 hectáreas de cultivos de hoja de coca en los departamentos de Nariño y Putumayo, zonas de influencia del grupo guerrillero, liderado por José Vicente Lesmes, alias Walter Mendoza.
“Ambas delegaciones coinciden en que el año 2025 será un año en el que se puedan concretar acuerdos de paz en beneficio de las comunidades y sea el inicio de la implementación de los acuerdos pactados”, se lee en el documento firmado entre las delegaciones.
Así mismo, el acuerdo también plasma que los integrantes de la Coordinadora Nacional EB no adelantarán acciones ofensivas contra las Fuerzas Militares y la Policía. “Ratifica el compromiso de no adelantar acciones ofensivas contra la Fuerza Pública, respetar la vida de la población civil y preservar el medio ambiente, como aporte a la paz territorial y de Colombia”, menciona el comunicado.
Frente a este punto, el Gobierno nacional se comprometió a retomar “las gestiones tendientes a la expedición del decreto relacionado con la suspensión de operaciones militares ofensivas, mencionadas en el acuerdo de Caracas de junio de 2024”.
De igual forma, se tiene previsto que se realice un encuentro entre ambas delegaciones y un grupo de 300 líderes del departamento de Putumayo, entre el 30 de enero hasta el primero de febrero de 2025, en el municipio de Puerto Asís, donde se evaluarán propuestas, avances y soluciones a las necesidades de las comunidades residentes de esta región del país.
“Las partes manifiestan su compromiso en que, al inicio del año 2025, se lleve a cabo una nueva sesión de trabajo en Bogotá”, afirmaron las partes en el comunicado.
Finalmente, el Gobierno y el grupo insurgente anunciaron la designación de una subcomisión jurídica para abordar todo lo relacionado con la situación jurídica de los integrantes de esta organización armada, contemplado en el punto cuatro del acuerdo inicial entre las partes.
“Reiteramos nuestro agradecimiento por el apoyo a los observadores de la comunidad internacional y de la Conferencia Episcopal, a la Gobernación de Nariño y a la Alcaldía de Tumaco por sus buenos oficios para el desarrollo del proceso de paz”, concluyeron.
No habrá cese al fuego
Aunque este anuncio generó todo tipo de expectativa en el país, se fue diluyendo cuando el jefe negociador del Gobierno Petro, Armando Novoa, confirmara que, dentro de los acuerdos no se plasmaba la posibilidad de que se decretara un cese bilateral al fuego con la Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano (Cneb).
El representante del ejecutivo, en declaraciones a Blu Radio, señaló que esta medida no se pudo concretar debido a que debe contar con la aprobación del presidente de la República, Gustavo Petro.
“No hay cese bilateral al fuego. Lo que hay es un cese unilateral al fuego por parte de la Segunda Marquetalia y el Gobierno registra satisfactoriamente este hecho”, declaró Novoa al citado medio de comunicación.
Sin embargo, Armando Novoa mencionó que el Gobierno ratificó su compromiso en cumplir los acuerdos pactados con la organización de Walter Mendoza, quienes desertaron de las filas de la Segunda Marquetalia, grupo armado liderado por Luciano Marin Arango, alias Iván Márquez.
“Ratificamos la voluntad de lograr acuerdos de paz en el menor tiempo posible, y hacerlo antes de que termine el gobierno del presidente Gustavo Petro”, añadió Novoa. Se espera que ambas delegaciones se reúnan nuevamente en la ciudad de Bogotá, a inicios del 2025.