Ideam reveló clima “catastrófico” que le espera a Colombia en 2050 y las temperaturas del primer trimestre de 2025

El instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales de Colombia (Ideam) presentó nuevas proyecciones climáticas que abarcan el período 2021-2100, las cuales advierten que para 2050 las temperaturas promedio en Colombia podrían aumentar entre 1,5 °C y 2 °C.

Dicho impacto impacto no será homogéneo: las regiones Andina y Amazonía, por su biodiversidad y ecosistemas frágiles, enfrentarán incrementos más pronunciados de temperatura, con consecuencias graves para su equilibrio ambiental.

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El instituto destacó que solo mediante la acción colectiva y la implementación de políticas públicas eficaces se podrá mitigar el cambio climático y proteger el futuro de Colombia y su biodiversidad. En un llamado a toda la sociedad, la entidad destacó la urgencia de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, preservar los recursos naturales y promover una adaptación responsable a los efectos climáticos ya evidentes.

Según el Ideam, el cambio climático amenaza los ecosistemas, y por ende, los servicios ambientales que estos proveen, como la purificación del aire, la regulación del clima y el suministro de agua. La pérdida de biodiversidad es uno de los efectos más alarmantes, ya que los cambios en patrones de temperatura y precipitación dificultan la adaptación de numerosas especies de flora y fauna a las nuevas condiciones, poniendo en riesgo su supervivencia y la estabilidad ecológica del país.

El 19 de noviembre de 2024, el Ideam dio a conocer el Informe de predicción a corto, mediano y largo plazo, donde prevé que para enero de 2025 incrementos de lluvias significativos en San Andrés y Providencia (entre el 10% y el 20%) y en la región Caribe, especialmente en La Guajira, Bolívar, Sucre y el Golfo de Urabá (entre el 10% y el 30%). Sin embargo, en sectores del norte de Magdalena, Córdoba y Cesar podrían registrarse reducciones de precipitación entre el 10% y el 20%.

En la región Andina, se anticipa un aumento generalizado de lluvias entre el 10% y el 20%, salvo en el norte de Santander, donde las lluvias disminuirán en igual proporción. La región Pacífica experimentará precipitaciones dentro de los valores climatológicos, aunque el norte del Chocó podría ver incrementos de hasta el 30%.

Por su parte, la Orinoquía tendrá un comportamiento mixto: alzas entre el 10% y el 30% en algunas áreas, mientras que sectores como el norte de Vichada y partes del Meta podrían registrar descensos de hasta el 30%. En la Amazonía, se proyecta una disminución de lluvias en gran parte de la región, salvo en Guainía y el norte de Guaviare, donde podrían aumentar entre el 10% y el 20%.

Mientras que en febrero del próximo año, las condiciones climáticas cambiarán levemente. San Andrés y Providencia mantendrán valores de precipitación acordes a los promedios históricos, mientras que en la región Caribe aumentarán entre el 20% y el 40% en departamentos como Magdalena, Atlántico, Bolívar, Sucre y el noreste de Córdoba, aunque en otras zonas se observarán disminuciones de entre el 10% y el 30%.

La región Andina continuará con incrementos de lluvias (del 10% al 30%), y la Pacífica verá un comportamiento mixto: lluvias promedio en la mayoría del área, pero alzas de hasta el 30% en Valle del Cauca, Nariño y el norte del Chocó. La Orinoquía, en cambio, enfrentará una reducción significativa en las lluvias, con descensos que van del 10% al 40%. Finalmente, en la Amazonía, las precipitaciones estarán por debajo de los promedios climatológicos, a excepción de áreas del piedemonte amazónico, Putumayo y el centro de Caquetá, donde aumentarán entre un 10% y 20%.

“A más largo plazo; es decir, para el período comprendido entre marzo-mayo/25 se estiman incrementos de precipitaciones superiores al 30% con respecto a los promedios 1991-2020 para la mayor parte de las regiones Caribe, Andina y Orinoquía; entre tanto, para la Amazonía y Pacífica se prevén precipitaciones dentro de los promedios climatológicos, excepto para Vaupés, centro-oriente de Caquetá y gran parte de Amazonas donde se estiman disminuciones de lluvias alrededor del 20%”, complementó el informe.