El presidente de Colombia, Gustavo Petro, sorprendió a los asistentes de un evento reciente con una inusual historia que rápidamente se volvió viral.
En pleno discurso, el mandatario compartió un relato paranormal sobre un supuesto encuentro con un fantasma en la histórica casa de huéspedes de Cartagena, un lugar cargado de simbolismo y ubicado en un antiguo fuerte naval.
Durante su intervención, Petro tomó un desvío del tema principal para detallar una experiencia que asegura haber vivido mientras revisaba un video del lugar. Según el mandatario, lo que vio en el material lo llevó a creer que había una presencia paranormal en la emblemática casa.
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“Allá en la hermosa casa de huéspedes que hicieron para los presidentes para invitar a los reyes y a los presidentes del mundo y a personas distinguidas, pero casi nadie conoce lo que está allá en el sitio naval. Hay una casa que fue un fuerte con cañones allí, en los lugares de los cañones semidestruidos tuve que mirar en un video un fantasma que salía de allí. Hay quienes no creen en eso, yo creo que son energías, pero ahí se veía un marinero por la moda de su uniforme”, reveló el mandatario mayor.
“Decían los que saben de eso, los muchachos de ahí, de la Armada, que era de los años 40 y que había una leyenda urbana de esa época en donde un jefe militar muy autoritario mandaba a los jóvenes al calabozo. Yo me puse a pensar que ahí se había ahogado una cantidad de jóvenes de la Armada, y uno se pegó un tiro. Ese era el dueño de la energía que salía puesta en el video”, aseguró Petro en la intervención.
Petro no se quedó solo con el relato, sino que reflexionó sobre el posible trasfondo del fenómeno. Incluso le asignó un nombre al supuesto fantasma: Fernando. Según su interpretación, el marinero habría muerto pensando en un amor perdido, lo que explicaría su presencia en el lugar.
“Él se iba siempre hacia el mar, yo creería que, le puse un nombre: Fernando, creía que se iba a ver a su novia o a su esposa y se quedó en el último segundo pensando en eso mientras moría. Entonces su energía retornaba a ver una y otra vez a ver una mujer amada que ya no existía”, explicó el presidente, agregando un tono simbólico a su experiencia.
El mandatario también reveló que, aunque no estaba seguro de la naturaleza de lo que presenció, decidió buscar ayuda religiosa para resolver el asunto.
“No sé si será cierto o no, pero yo metí ahí y metí a un cura, etc”, confesó Petro.
La narración de Petro no pasó desapercibida. Usuarios de redes sociales reaccionaron con una mezcla de asombro, humor y escepticismo ante las palabras del presidente. Algunos cuestionaron el momento elegido para compartir la historia, mientras que otros se dedicaron a bromear sobre el “fantasma Fernando”.
Memes, comentarios sarcásticos y teorías sobre el relato inundaron las plataformas digitales. “Petro es el primer presidente que incorpora fantasmas en su agenda de gobierno”, comentó un usuario en tono de burla. Otro sugirió que el mandatario debería incluir a ‘Fernando’ en su gabinete. Mientras que hubo un grupo que arremetió en contra de la historia y le dejaron mensajes contundentes en las redes sociales, incluso insinuaron que estaba en estado de alicoramiento.
“¿Así o más corrido de la teja?”, “Más indignante es saber que hay personas que asisten para escuchar sus idioteces”, “Mucho Bazuco ya”, “Ahora mandará a la fiscalía de bolsillo”, “Ese Petro estaba era, pero borracho”.
Gustavo Petro, conocido por su estilo directo y poco convencional, ha sumado este curioso relato a la lista de momentos inesperados durante su gestión. Aunque el “fantasma Fernando” ahora forma parte de la conversación nacional, el episodio deja abierta la pregunta de si fue una anécdota simbólica o una auténtica experiencia paranormal. Lo cierto es que, una vez más, Petro logró captar la atención, tanto de sus seguidores como de sus críticos.