Daniel Briceño se ha convertido en uno de los personajes más influyentes en redes sociales, gracias al ejercicio político, que no solo lo ha llevado a hacerle control a la gestión del alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, como correspondería por el cargo que ostenta, sino también a diferentes instituciones del orden nacional. De hecho, hay quienes se atreven a decir que es el “terror” de algunas de las dependencias del Estado y tal ha sido la magnitud de sus denuncias, que han puesto a responder al presidente Gustavo Petro.
Gracias a su habilidad para hacerle rastreo a los procesos de contratación, ha sacado a la luz diferentes escándalos que han dejado mal parado al Ejecutivo; el más reciente, el de los bajos niveles de ejecución de la infraestructura en educación superior, pues pese a que habría un presupuesto de $750.000 millones para 48 proyectos a través de la Financiera de Desarrollo Territorial S.A. (Findeter), solo cuatro registran algún tipo de progreso; aunque tras su revelación, recibió una dura respuesta del Ministerio de Educación.
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En medio de esta labor de veeduría, que combina con su ejercicio como concejal de Bogotá, cargo al que llegó con el respaldo de 48.470 capitalinos, siendo el cabildante más votado del Centro Democrático de los siete que resultaron elegidos, Briceño continúa poniéndole la lupa a las actuaciones de Petro y sus funcionarios. Lo que le ha valido fuertes cuestionamientos a su labor, pues ha sido acusado de aprovechar su curul en el Concejo como una especie de trampolín hacia un cargo de mayor importancia.
Precisamente, en relación con estos señalamientos, el joven político de 32 años, que hizo parte en el pasado del equipo del hoy colega Emel Rojas, del partido Colombia Justa Libres, se pronunció. Y en entrevista concedida a Infobae Colombia le respondió a quienes apuntan hacia su tarea y, más allá de desmentir los señalamientos, no descartó que su intención, en un futuro cercano, sea aspirar a otro cargo, si así siente la necesidad; pues la forma en la que entiende la política, añadió, no está atada a cargos sino a ideales.
Daniel Briceño no descartó una posible aspiración al Congreso en 2026
Ante la pregunta hecha por esta redacción, en el sentido de si su interés en todo lo que ocurra con el Gobierno nacional se debe a su deseo de aspirar a un cargo de elección popular, como el de representante a la Cámara o senador, Briceño no negó dicha posibilidad. De hecho, fue claro en decir que, aunque siente profundo agradecimiento por sus electores al haberlo llevado al cabildo distrital, a él no lo atan este tipo de dignidades, sino donde sienta que pueda hacer una mejor labor de veeduría.
“Yo he hecho este ejercicio desde mucho antes de lanzarme a la política. Estoy en un cargo y sigo haciendo el mismo ejercicio, y si Dios me da la oportunidad de tener otro cargo, pues seguiré haciendo el mismo ejercicio. Porque yo sí les digo una cosa: yo no mido mi vida política por cargos; es decir, yo no tengo un orden de vida donde me dicen: ‘ah, usted es concejal, ahora tiene que ser representante, senador y después alcalde’”, afirmó Briceño sobre el particular, con lo que dejó en claro que podría haber novedades a futuro.
En este orden de ideas, Briceño también remarcó que inició un proyecto en el que busca que los ciudadanos también aprendan a hacer control y veeduría a los gobernantes y las entidades del Estado. “Le estamos enseñando a las personas, le estamos mostrando a la gente, que sí se puede hacer veeduría, que sí se puede hacer control, que tenga efectos; es decir, que modifique las conductas de los funcionarios cuando uno hace ese tipo de control”, afirmó el cabildante, que, acto seguido, reafirmó las aspiraciones que tendría.
“Lo digo abiertamente, si esto me lleva a otro lado, a otro puesto, pues eso será. Yo no mido mi vida política en cargos. Yo llegué aquí al Concejo de Bogotá por obra y gracia, literalmente, de la gente. Sin reuniones, sin máquinas, sin estructuras, sino haciendo ese tipo de veeduría”, destacó el político bogotano. “No es como que tenga un orden definido de qué es lo que voy a hacer. Y si, pues me quedo en el Concejo, estaré también feliz porque yo estoy muy agradecido y le agradezco a la vida”, precisó.
Por último, lanzó a sus detractores una clara advertencia: la de continuar el trabajo que ha hecho hasta el momento, así exista quienes les resulte incómodo. “No voy a dejar de hacerlo. Sé que mucha gente no le gusta y que mucha gente pensaba que yo, por ser concejal, iba a dejar de hacer control. Pero lo que hemos demostrado es que nuestro interés no era ser solo concejal. Trabajamos para que ellos se sientan bien representados, pero nuestro ejercicio tiene que ver con un tema de veeduría”, puntualizó.