El Gobierno de Colombia se encuentra en una maratón contrarreloj para aprobar la reforma tributaria, también conocida como ley de financiamiento, antes de que finalicen las sesiones del Congreso el 16 de diciembre de 2024.
El proyecto de ley, que tiene ahora una meta de recaudo de 9,8 billones de pesos, sufrió algunas modificaciones en al menos cincuenta artículos y otros que de erradicaron desde su presentación inicial el 10 de septiembre.
Entre los cambios más destacados, —además de reducir la meta de $12 billones inicialmente previstos cuando el proyecto fue presentado— está la preservación de algunos impuestos, con algunos cambios.
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Por ejemplo, a través de un informe económico del diario La República, se conoció que se mantiene la reducción progresiva del impuesto de renta corporativo, que fue una medida clave del exministro Ricardo Bonilla.
Los impuestos que siguen en pie
Pero también la actual propuesta de reforma tributaria establece una disminución gradual del impuesto de renta para las empresas, que pasaría de del 34% actual a una tarifa diferenciada: 27% para las Mipyme, 30% para las empresas medianas y 33% para las grandes corporaciones.
Estos ajustes comenzarían a aplicarse de inmediato para las Mipyme, mientras que para las otras empresas se implementarán de manera paulatina hasta 2039.
Además, la reforma incluye una sobretasa de cinco puntos para el sector financiero y una para el sector extractivista de carbón y petróleo, que se incrementaría hasta un 20%.
Esta medida, desde luego, causó preocupación entre los gremios productivos, ya que podría afectar la competitividad de estos sectores, como indicó el análisis realizado por el medio.
Otro aspecto relevante de la actual propuesta es la de adelantar la regla fiscal para 2025 y la implementación de un mecanismo de regla fiscal verde.
También se contempla la eliminación del régimen simple de tributación, que venía desde el 2019, y que la Ocde había destacado en un informe anterior sobre las perspectivas económicas del país. Este régimen especial de tributación finalizaría en enero de 2026.
En las características de este régimen, como destacó la Dian, se ofrecen beneficios “al empresario, emprendedor, comerciante y profesionales, que trasciende el habitual régimen ordinario, ya que brinda menores tarifas, las cuales se establecen según el nivel de ingresos, generándole al contribuyente un ahorro de dinero a la hora de pagar impuestos, el cual podrá invertir para potencializar su actividad en procesos intelectuales, de innovación y desarrollo, maquinaria, contratación de talento humano, entre otros”.
Impuestos para las personas naturales
En cuanto a los impuestos para personas naturales, se mantendría el aumento a 41% de la tarifa marginal para residentes con ingresos superiores a $120 millones mensuales. Asimismo, se incrementaría a 25% la tarifa general del impuesto complementario a las ganancias ocasionales provenientes de loterías y rifas, que actualmente es del 20%.
A través del medio se conoció que, incluso, la iniciativa legislativa que ha resultado controvertida propone conciliar o terminar por mutuo acuerdo los procesos que los contribuyentes tienen con la Dian mediante el pago del capital.
Además, se amplía la sujeción de impuestos al patrimonio a las sociedades nacionales y establecimientos permanentes de sociedades extranjeras sobre activos fijos reales no productivos.
En la ponencia positiva presentada por la representante Olga Lucía Velázquez, se mantienen varios artículos de la versión previa, aunque con cambios evidentes. Entre ellos, la exención de IVA para municipios pequeños, menores de doscientos mil habitantes, en servicios como alojamiento en hoteles y centros vacacionales, medida que se aplicaría durante tres años.
El proyecto de ley será debatido por las Comisiones Económicas del Senado y la Cámara de Representantes a partir del 11 de diciembre, después de haber enfrentado retrasos debido a la falta de respaldo político.
El actual ministro de Hacienda Diego Guevara enfatizó que el Gobierno está trabajando para construir consenso en el Congreso, un esfuerzo que considera crucial para la aprobación de la reforma. “Estamos tratando de construir consenso en un ejercicio democrático con todo el Congreso”, explicó el nuevo ministro.