Las tragedias en diciembre parecen ser cada vez peores, pues la víctima fatal de uno de los más recientes casos es un niño de 10 años, que recibió una fuerte descarga eléctrica que le ocasionó la muerte. Los hechos ocurrieron en medio de una tormenta eléctrica en Segovia, un municipio ubicado en el nordeste antioqueño.
De acuerdo con la versión de los familiares, el hecho ocurrió durante la jornada del 1 de diciembre de 2024 en la vereda Rancho Quemado, una de las más alejadas del casco urbano de Segovia, donde cayó un fuerte aguacero acompañado de rayos, como es costumbre en esta región.
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El menor de edad, según relataron sus familiares, fue alcanzado por una descarga eléctrica mientras se bañaba, lo que lo dejó inconsciente de inmediato, de acuerdo con el reporte oficial que quedó consignado por las autoridades.
A pesar de los esfuerzos de sus allegados por trasladarlo rápidamente al hospital San Juan de Dios en Segovia, el menor de edad no respondía, por lo que posteriormente tuvo que ser remitido a Medellín, donde los médicos confirmaron que falleció en el camino, debido a la gravedad de sus heridas; su fallecimiento ocurrió específicamente en el sector conocido como Tigrito, en el corregimiento de Vegachí.
Del mismo modo, la Alcaldía de Segovia tuvo que intervenir y emitir un comunicado sobre la situación, desmintiendo rumores sobre una posible lesión con pólvora, puesto que esta fue una de las primeras versiones que circularon entre las personas de la comunidad.
Las autoridades locales aclararon la situación, asegurando que la causa fue una descarga eléctrica, de acuerdo con la valoración médica realizada por los especialistas. Sin embargo, se confirmó que la Policía inició la investigación correspondiente con el fin de esclarecer los detalles del suceso y así determinar las circunstancias exactas que llevaron a la muerte del niño.
Muertes por descargas eléctricas en el país
Un estudio de la Universidad Nacional de Colombia reveló que Antioquia es el departamento del país con mayor riesgo de muertes por impacto de rayos, lo que generó alerta entre sus habitantes en medio de la temporada de lluvias que se ha registrado en el territorio durante los últimos meses del año.
Cabe mencionar que, esta es reconocida por ser una región minera, que es especialmente vulnerable a las tormentas eléctricas. El estudio mencionado lleva por nombre “Evaluación del riesgo por rayos para Colombia” y allí se analizaron datos del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane).
Y es que la entidad reportó 1.313 muertes por rayos en el país entre 1997 y 2017, lo que representa un promedio de cinco muertes mensuales por esta causa que tiene en alerta a los padres y cuidadores, puesto que los niños también resultan afectados.
Ante la gravedad de esta situación, las autoridades recordaron la importancia de seguir recomendaciones de seguridad durante tormentas eléctricas, como evitar actividades al aire libre, alejarse de objetos altos y conductores de electricidad, y desconectar dispositivos electrónicos. Estas son algunas de las precauciones que debe tomar durante un evento natural de este tipo para minimizar riesgos:
- No refugiarse bajo árboles, ya que pueden atraer rayos.
- Evitar estar en espacios abiertos, como campos o áreas naturales.
- No utilizar dispositivos conectados a enchufes eléctricos.
- Evitar el contacto con elementos metálicos, como rejas y estructuras, debido a que estos se vuelven conductores.
- No estar cerca de cuerpos de agua, como piscinas, ríos o lagos.
- No usar teléfonos fijos ni ducharse, ya que las tuberías de metal pueden conducir electricidad.
Siguiendo estas recomendaciones, se pueden reducir considerablemente los riesgos asociados con las tormentas eléctricas.