En la plenaria del Senado de la República del martes 3 de diciembre de 2024, la senadora María José Pizarro presentó una propuesta para la creación de una comisión encargada de auditar la deuda pública que dejó el gobierno de Iván Duque, y que actualmente está siendo asumida por la administración de Gustavo Petro.
La senadora Pizarro, durante su intervención en el Senado, destacó que el Estado colombiano deberá destinar aproximadamente 112 billones de pesos en 2025 para el servicio de la deuda, lo que representa el 21,5% del presupuesto nacional.
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“Entre el año 2020 y el año 2022, el endeudamiento de nuestro país aumentó en 200 billones de pesos, pagaderos entre cinco y diez años”, aseguró Pizarro, enfatizando que este endeudamiento no correspondía al gobierno actual, sino al anterior.
Según la congresista, este aumento en la deuda se debió a una serie de decisiones tomadas durante el mandato de Iván Duque, incluyendo la contratación de créditos con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en condiciones desfavorables, lo que, según la congresista, ha puesto una carga financiera sobre el gobierno de Petro.
En este contexto, la senadora propuso la creación inmediata de una auditoría parlamentaria a la deuda pública: “Propongo que cree usted de manera inmediata una auditoría parlamentaria a la deuda pública de nuestro país, para investigar cómo fueron utilizados los recursos de deuda durante el gobierno anterior”, señaló Pizarro, dirigiéndose al presidente del Senado, Efraín Cepeda.
A través de esta propuesta, la senadora busca que se haga una revisión detallada de las condiciones en las que se adquirieron los préstamos y los términos en los que fueron utilizados los fondos.
Pizarro no solo criticó la gestión financiera de la administración Duque, sino que destacó la responsabilidad asumida por el gobierno de Petro para enfrentar las consecuencias de esa deuda: “Este gobierno asumió decisiones difíciles, como el saneamiento del Fondo de Estabilización de los Combustibles, y en medio de estas dificultades, hemos avanzado en la recuperación económica”.
También, resaltó que, a pesar de las dificultades económicas, se logró avances en la reducción del desempleo, que se mantiene por debajo de los dos dígitos, y en la disminución de la pobreza, con 2.9 millones de personas que han salido de la pobreza en los últimos dos años.
La deuda del gobierno Duque
Por su parte, el presidente Gustavo Petro también ha señalado en diversas ocasiones el impacto de la deuda heredada de la administración Duque.
Durante el XXI Congreso Nacional de Infraestructura, Petro reiteró que su gobierno está, en gran parte, pagando la deuda que dejó el exmandatario: “Estamos pagando la deuda de Duque”, y aludió a los compromisos adquiridos con la banca multilateral, en particular con el FMI, durante la gestión de Duque, cuando el gobierno colombiano solicitó créditos para contrarrestar los efectos económicos de la pandemia del COVID-19.
El gobierno de Petro ha buscado renegociar parte de esa deuda con el FMI con el objetivo de aliviar los costos financieros a través de una “compra de cartera” con tasas de interés más bajas.
Según el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, esta operación permitiría reducir los costos de los préstamos en un 36%, lo que representaría un ahorro cercano a los 1.200 millones de dólares anuales; sin embargo, aún se están evaluando los plazos y condiciones de esta negociación.
La situación de la deuda pública de Colombia ha sido un tema central en el debate económico del país, especialmente por el alto porcentaje de los recursos del presupuesto nacional que se destinan al servicio de la deuda externa.
Según Bonilla, el recorte presupuestal necesario para 2024 podría superar los 20 billones de pesos, aunque aún no se ha determinado una cifra exacta.