El martes 3 de diciembre de 2024, el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) presentó las cifras de productividad en Colombia, un tema crucial en las negociaciones para el aumento del salario mínimo de 2025.
Sin embargo, estas cifras fueron objeto de controversia, ya que entidades como la Andi, Fedesarrollo y Anif le solicitaron a la entidad y al Gobierno nacional una revisión técnica de los datos proporcionados. Según estas organizaciones, las cifras de productividad no reflejan con precisión el contexto económico actual del país.
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El Dane informó que la Productividad Total de los Factores (PTF) fue del 1,73%, mientras que la productividad laboral por hora trabajada alcanzó el 3,43%. Además, la productividad laboral por persona empleada fue del 1,76%, y se reportó una productividad media del 3,14%.
Estas cifras, según el Dane, indican una tendencia positiva en términos de eficiencia. Sin embargo, las cifras sorprendieron a empresarios y centros de estudios, que consideran que hay un desajuste entre estos datos y los indicadores macroeconómicos del país.
En una carta dirigida a la directora del Dane, Piedad Urdinola, los líderes de la Andi, Fedesarrollo y Anif expresaron su preocupación por la discrepancia entre las cifras de productividad y el crecimiento económico reportado para los primeros nueve meses del año, que fue del 1,6%, con un aumento del empleo del 0,7%. Según estas entidades, esto implicaría una mejora en la productividad del 0,9%, lo que contrasta con las cifras del Dane.
“En el marco de la discusión sobre el incremento del salario mínimo para 2025, consideramos esencial que la Comisión de Concertación de Políticas Laborales y Salariales cuente con información técnica precisa y ampliamente discutida sobre la evolución de la productividad en Colombia”, dice el comunicado firmado por los líderes gremiales.
Las organizaciones le solicitaron a la Subcomisión de Productividad que se genere un espacio para realizar una revisión técnica de los métodos, supuestos y datos utilizados por el Dane para calcular la productividad. Además, han propuesto invitar a otras entidades especializadas a presentar sus propios cálculos y análisis sobre este indicador clave, con el fin de enriquecer el debate con una visión integral y diversa.
“De acuerdo con los datos preliminares presentados por el Dane, la productividad laboral habría aumentado más de un 3% en los tres primeros trimestres de 2024, y la productividad total de los factores aumenta 1,73%”, dice el documento, y se añade que: “Estas cifras contrastan significativamente con el contexto económico nacional actual. Según los reportes más recientes, para los primeros nueve meses del año, el crecimiento económico fue del 1,6% y el empleo aumentó en promedio 0,7% durante este mismo periodo, lo que implicaría una mejora en la productividad del 0,9%”.
“Este desajuste entre los indicadores macroeconómicos y la cifra reportada por el Dane genera inquietudes que ameritan un análisis técnico más detallado. En consecuencia, hacemos un llamado para que la Comisión: Genere un espacio para realizar una revisión técnica con el Dane sobre los métodos, supuestos y datos utilizados para calcular la productividad. Invite a otras entidades especializadas, como Fedesarrollo y Anif, a presentar sus propios cálculos y análisis sobre este indicador clave, con el fin de enriquecer el debate con una visión integral y diversa”, solicitan los gremios en su carta.
La ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, afirmó que las cifras del Dane son el punto de partida para la negociación del salario mínimo entre el gobierno, los trabajadores y los empresarios.
La negociación del salario mínimo depende de dos factores importantes: el cierre de la inflación al 2024 y la cifra de productividad. Esta última mide la eficiencia en la combinación de instalaciones, maquinaria, desarrollo, materias primas y horas trabajadas por las personas ocupadas en el país.
“Garantizar una discusión técnica sólida sobre la productividad es crucial para adoptar decisiones informadas y equilibradas que beneficien tanto a los trabajadores como a los empleadores. Este diálogo, basado en datos confiables y análisis rigurosos, fortalecerá la legitimidad del proceso de concertación salarial”, añaden en la carta.
Las entidades que cuestionan las cifras del Dane argumentan que basar las decisiones en datos que no reflejen con precisión la realidad nacional podría generar consecuencias adversas para el empleo, la formalidad y el control de la inflación. Por ello, insisten en la necesidad de garantizar una discusión técnica sólida sobre la productividad para adoptar decisiones informadas y equilibradas que beneficien tanto a los trabajadores como a los empleadores.
“Por el contrario, basar las decisiones en datos que no reflejen con precisión la realidad nacional podría generar consecuencias adversas para el empleo, la formalidad y el control de la inflación”, concluye el comunicado.