En un nuevo capítulo de controversia en torno a los crímenes de ejecuciones extrajudiciales, mal llamados ‘falsos positivos’, el congresista Miguel Polo Polo intensificó su postura crítica hacia la cifra de 6.402 víctimas reportada por la Comisión de la Verdad, señalando inconsistencias y exigiendo pruebas concretas que respalden dicho número.
El 28 de noviembre, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) reveló un listado con los nombres de 1.934 víctimas de desaparición forzada, presentadas como bajas en combate por agentes del Estado —luego de la insistencia del congresista, que en reiteradas ocasiones señaló no creer en la cifra divulgada—, lo que provocó una fuerte reacción por parte del representante a la Cámara.
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La discusión pública entre Polo Polo y las Madres de Falsos Positivos de Colombia (Mafapo) alcanzó un momento álgido cuando el congresista, durante una exposición artística organizada por el colectivo, tomó las botas de caucho exhibidas como símbolo de memoria y las lanzó al suelo, refiriéndose a ellas como objetos que debían ir a “la basura”. Las botas fueron una conmemoración en representación a sus hijos asesinados y posteriormente presentados como guerrilleros caídos en combate.
El gesto del congresista desató una ola de críticas en redes sociales y por parte de otros legisladores, mientras que Polo Polo reiteró su postura escéptica ante la existencia de los ‘falsos positivos’, calificándolos de “mito” y exigiendo la publicación de los nombres de las víctimas. “Los tales falsos positivos no existen”, dijo en medio del enfrentamiento, cuestionando la veracidad de las cifras presentadas.
Desde entonces, el congresista solicitó de forma insistente y, con un tono que llegó a ser irónico, exigió que se revelaran los nombres de las personas incluidas en esa abultada cifra. Esta ha sido utilizada como referencia por numerosos ciudadanos para reclamar justicia y se convirtió en un símbolo recurrente en diversas movilizaciones, como las del estallido social de 2021.
De esta manera, la presentación de la justicia transaccional incluyó los nombres de 1.934 víctimas de desaparición forzada, un dato que, si bien refuerza las denuncias de graves violaciones de derechos humanos durante el conflicto armado, no alcanza a cubrir la cifra de 6.402 víctimas establecida por la Comisión de la Verdad y usada como referencia por organizaciones de derechos humanos y sectores políticos. La jurisdicción aclaró que esta cifra es preliminar y que su trabajo de identificación y judicialización continúa en curso.
Este anuncio sirvió de base para que Polo Polo reiterara su escepticismo en redes sociales, pues en su cuenta de X, el congresista expresó: “Y al final teníamos la razón, la JEP no pudo dar los 6.402 nombres ¡No los tienen!”.
“El petrismo hizo campaña con el número de 6.402 falsos positivos, pero la JEP solo ha entregado 1.900 nombres. ¡No los tienen! Ahora falta determinar si esos nombres son realmente casos confirmados de falsos positivos y verificar si no hay repeticiones o errores”, publicó el representante a la Cámara.
El congresista sostiene que esta disparidad de cifras afecta la credibilidad del proceso y cuestionan si el número inicial fue utilizado políticamente: “La izquierda y medios sin rigor intentaron lincharnos por decir la verdad, pero hoy callan al no poder dar la lista completa”.
Miguel Polo Polo anuncia revisión de casos de ‘falsos positivos’ reportados por la JEP
En otro mensaje publicado en su cuenta de X, el congresista Miguel Polo Polo expresó su intención de verificar la autenticidad de los casos reportados por la JEP en relación con las ejecuciones extrajudiciales conocidas como falsos positivos.
“Buscaremos cada nombre, cada cédula, cada antecedente y cada caso de los 1.900 falsos positivos que dio la JEP para verificar que TODOS sean reales y que no haya colados”, afirmó el congresista, que además criticó la disparidad entre los 6.402 casos mencionados anteriormente y los 1.934 nombres entregados hasta ahora.
Polo Polo, conocido por sus posturas críticas hacia la JEP y sectores de la izquierda política, señaló que su objetivo es evitar presiones indebidas sobre militares y posibles casos de falsas víctimas: “No dejaremos que sigan presionando militares inocentes ni que sigan haciéndose pasar por falsas víctimas para cobrar indemnizaciones”.