Ejército desmanteló depósito ilegal de explosivos en el Putumayo: iban a ser utilizados para realizar atentados a la fuerza pública con ayuda de drones

En el operativo adelantado en el municipio de Villagarzón fueron hallados más de 525 artefactos explosivos improvisados, 210 kilogramos de anfo y seis kilos de metralla

Guardar
Esta operación fue realizada en el sur del país por la Vigésima Séptima Brigada de Selva y el Batallón de Infantería N° 25 - crédito Ejército Nacional

En los operativos que adelantan las tropas del Ejército en varios puntos del territorio nacional, soldados de la Vigésima Séptima Brigada de Selva y el Batallón de Infantería N.° 25 destruyeron de manera controlada un depósito de explosivos que fue descubierto en el departamento de Putumayo, al sur de Colombia.

En la espesura del terreno selvático los uniformados, acompañados de agentes caninos, encontraron una caleta donde se hallaron más de 525 artefactos explosivos improvisados, 210 kilogramos de anfo y seis kilos de metralla, destacó el brigadier general Yor William Cotua Muñoz, comandante de la Brigada N° 27 de Selva.

Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel.

El resultado de esta operación militar se dio a conocer la mañana del viernes 29 de noviembre de 2024, y se llevó a cabo en la vereda Río Blanco, en jurisdicción del municipio de Villagarzón, Putumayo.

El general Cotua agregó que estos materiales “estarían siendo preparados para utilizarse por medio de un dron, al parecer con el objetivo de atentar de manera indiscriminada contra la población civil y la infraestructura crítica del Estado, lo que viola el derecho internacional humanitario y los derechos humanos”.

En la vereda Río Blanco, en jurisdicción del municipio de Villagarzón, Putumayo, se llevó a cabo el hallazgo y posterior detonación de forma controlada del material explosivo - crédito Ejército Nacional

Todos los artefactos y demás elementos se encontraron almacenados debajo de plásticos de color negro. Sin embargo, de nada sirvió dejarlo ocultos en medio de los árboles, porque al final los militares dieron con la ubicación de la caleta, que destacó el general Cotua, pertenecería al Grupo Armado Organizado Residual —GAO-r 48— conocido como Comandos de Frontera, que delinque en el Putumayo.

Con este operativo “ya son más de 2400 artefactos explosivos incautados en lo que va corrido del año 2024 en el departamento del Putumayo”, añadió el oficial, que dijo que se continuarán con los esfuerzos para seguir debilitando “el accionar delictivo de los grupos armados organizados que delinquen en el sur del país, afectando sus redes logísticas y criminales”.

Por último, la Sexta División del Ejército invitó a la población civil para que denuncie cualquier tipo de hecho que afecte la tranquilidad de la región en la línea antiterrorista 107 y la línea del Gaula Militar 147. Estas llamadas se toman bajo absoluta reserva y protección.

El material explosivo, destacó la Sexta División del Ejército, iba a ser utilizado para cometer atentados contra la fuerza pública a través de drones - crédito Ejército Nacional
El material explosivo, destacó la Sexta División del Ejército, iba a ser utilizado para cometer atentados contra la fuerza pública a través de drones - crédito Ejército Nacional

Esa misma semana los Comandos de Frontera sufrieron recibieron un golpe a sus finanzas

La Fiscalía General de la Nación y la Policía Nacional de Colombia desmantelaron una red de lavado de dinero vinculada al narcotráfico, que operaba en varios departamentos del país.

Esta organización, liderada presuntamente por Édison Bernardo Rosero, alias Chamón, utilizaba el sector salud como fachada para blanquear recursos ilícitos provenientes del tráfico de cocaína.

La investigación reveló que la red criminal, asociada a los Comandos de Frontera, una estructura derivada de las disidencias de las Farc, empleaba fondos del narcotráfico para establecer Instituciones Prestadoras de Salud (IPS), adquirir ambulancias y vehículos de alta gama.

Estos activos, valorados en más de 6.400 millones de pesos, eran registrados a nombre de diversas personas encargadas de mantener la operación y generar ingresos aparentes.

El operativo, que se llevó a cabo en departamentos como Putumayo, Caldas, Nariño, Huila, Cauca y Valle del Cauca, permitió la captura de varios integrantes de la red, incluido su presunto líder, Édison Bernardo Rosero. Las autoridades identificaron que los servicios médicos establecidos en estas regiones servían como estrategia para ocultar el origen ilícito de los fondos.

La red criminal al servicio de los Comandos de Frontera operaba en departamentos como Putumayo, Nariño, Cauca y Valle del Cauca - crédito Fiscalía General de la Nación

Los Comandos de Frontera controlaban el tráfico de cocaína desde la zona fronteriza con Ecuador, y los recursos ilegales eran utilizados para adquirir 24 vehículos, entre ellos ambulancias y un automóvil de alta gama, además de una droguería y ocho sociedades comerciales. Estos bienes eran parte de la estrategia para aparentar una fachada legal y blanquear el dinero del narcotráfico.

La desarticulación de esta red representa un golpe significativo al lavado de dinero en Colombia, destacaron las autoridades. La operación es parte de los esfuerzos continuos para combatir el crimen organizado y el narcotráfico en el país.

Guardar