La insólita “comisión” que pedía cabecilla del Clan del Golfo a contratistas de Invías para que pudieran trabajar

Las autoridades efectuaron un contundente golpe contra la delincuencia en el departamento de Bolívar tras la captura de Luis Alfredo Marrugo Arroyo, alias David, señalado de ser cabecilla financiero del Clan del Golfo.

Su detención se logró tras las acciones delictivas que cometía contra contratistas del Instituto Nacional de Vías (Invías) desde el 7 de noviembre, a quienes extorsionaba exigiendo el pago del 5% del valor de la obra a los trabajadores a cambio de dejarlos trabajar, o de lo contrario, podrían ser objeto de atentados contra sus vidas.

Precisamente, fueron los trabajadores los que denunciaron ante las autoridades lo que estaba sucediendo, por lo que las autoridades iniciaron con un minucioso seguimiento al presunto delincuente.

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Las autoridades observaron que, ante la negativa de los trabajadores de cumplir con las pretensiones de “David”, este incineró maquinaria pesada de la empresa para así ejercer mayor presión en el pago de la extorsión.

“El pasado 15 de noviembre, luego del incumplimiento de una exigencia de dinero, el Clan del Golfo, presuntamente bajo las órdenes de alias David, incendió tres maquinarias pesadas de la empresa contratista en el municipio de Arjona, con el fin de presionar a la empresa para que realizara el pago exigido por esta estructura criminal”, indicó el coronel Alejandro Reyes, comandante de la Policía de Bolívar.

En efecto, mediante una orden de captura y allanamiento, las autoridades lograron la captura del criminal en el municipio de San Estanislao de Kostka. A Marrugo Arroyo se le acusa de los delitos extorsión agravada, fabricación, tráfico o porte de armas de fuego, y terrorismo, cargos que no aceptó durante las audiencias de legalización de captura. No obstante, un juez de control de garantías ordenó su arresto en centro carcelario.

“Este operativo representa un golpe significativo contra una de las estructuras más peligrosas de la región, que continúa sembrando el terror entre los habitantes y empresarios de Bolívar. La Policía Nacional continuará con su investigación para dar con otros posibles miembros del Clan del Golfo involucrados en estos actos delictivos”, complementó el coronel Reyes.

Cabe señalar que, en otras zonas del país, también se han llevado a cabo capturas que afectan la estabilidad del Clan del Golfo. Por ejemplo, en operativos realizados en la subregión del Urabá antioqueño, la policía capturó a un presunto líder del Clan del Golfo, según el comandante de Policía de Urabá, coronel William Zubieta, se trata de alias Bola ocho, señalado líder criminal en las poblaciones de Mutatá, Carepa y Apartadó (Antioquia).

Según las autoridades, “Bola Ocho” habría estado al frente de un grupo de aproximadamente 65 personas, involucradas en actividades ilegales como el narcotráfico, homicidios selectivos y extorsiones.

Adicionalmente, “Bola Ocho” es considerado como uno de los hombres de confianza de alias El Gurre o La Mona, segundo al mando de la subestructura Carlos Vásquez del Clan del Golfo. La captura de este delincuente se realizó bajo una orden judicial por los delitos de concierto para delinquir agravado por homicidio y tráfico de estupefacientes, según detalló el coronel Zubieta.

“Un sujeto dedicado por más de 10 años al crimen. Este sujeto es capturado por orden judicial por el delito de concierto para delinquir agravado por homicidio y tráfico de estupefacientes”, afirmó el coronel Zubieta.

De otro lado, en una segunda operación, la policía detuvo a dos personas que se desplazaban en una motocicleta. Durante la inspección del baúl del ciclomotor, los uniformados encontraron más de mil cartuchos de fusil calibre 7.62. Estos cartuchos, según las autoridades, estaban destinados a las estructuras del Clan del Golfo.

La captura se logró tras una persecución en un operativo coordinado con las unidades del nuevo modelo de servicio policial y en medio de la ejecución de un plan candado. El material incautado y los capturados fueron puestos a disposición de la fiscalía para su respectiva judicialización. Ambos procedimientos fueron reportados en la tarde del miércoles 27 de noviembre, en un puesto de control en el corredor vial Carepa-Apartadó.