La incautación de 600 millones de pesos en efectivo, que iban ocultos en paquetes forrados con plásticos negros en una camioneta que transitaba por una de las carreteras del Cauca, fue calificada por la coronel Susana Blanco, directora de Tránsito y Transporte de la Policía Nacional, como un ‘golpe a la criminalidad’.
El resultado se dio a la altura del municipio de Patía, en donde los dos hombres que se transportaban en el vehículo fueron requeridos por los agentes en el puesto de control. Cuando iniciaron con la inspección minuciosa, detectaron varios paquetes camuflados en la estructura interna del automotor.
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Ambos sujetos fueron capturados y el dinero fue decomisado junto a la camioneta, detalló la oficial, quien agregó que “esta millonaria incautación afecta directamente las finanzas criminales de grupos armados que hacen presencia en ese departamento del país”.
“El dinero en efectivo, los 600 millones de pesos, fueron encontrados mediante la modalidad tipo caleta. Un total de 24 paquetes con 25 millones de pesos cada uno en billetes de 50 mil pesos. La pericia de nuestros uniformados de Tránsito y Transporte permitió hacer la inspección de un vehículo tipo camioneta en el que se movilizaban dos sujetos”, expresó la coronel Blanco.
Sumado a estos detalles, la oficial de la Policía Nacional confirmó que la Dirección de Tránsito y Transporte “pudo establecer que el vehículo cubría la ruta desde la ciudad de Cali, en el departamento de Valle del Cauca, hacia la ciudad de Pasto, en el departamento de Nariño”.
Frente al hallazgo del dinero oculto en una caleta, la coronel Blanco aseguró que grupos al margen de la ley que hacen presencia en Valle del Cauca, Nariño y Cauca estarían optando por esta modalidad para transportar no solo dinero, sino drogas y combustible, que tendría como fin utilizarse para el procesamiento de cocaína.
“Somos contundentes contra las finanzas criminales de grupos armados y al margen de la ley. Hombres y mujeres de la Dirección de Tránsito y transporte seguirán en las vías realizando operaciones de control y prevención”, concluyó la jefe de la Dirección de Tránsito y Transporte de la Policía.
Sumado a esto, desde la institución se afirmó que seguirán de forma rigurosa con los controles mediante los grupos especializados de control permanente enfocados contra el crimen, el narcotráfico y la delincuencia en varios departamentos que son de especial atención para las autoridades por la presencia de varios grupos armados ilegales y bandas delincuenciales en Magdalena, Valle del Cauca, Cauca, Meta, Antioquia y Norte de Santander.
Banda delincuencial en Medellín recibía armas desde los Estados Unidos camufladas entre electrodomésticos
En un operativo conjunto entre la Policía Nacional de Colombia, la agencia de seguridad nacional de Estados Unidos (HSI) y la Fiscalía General de la Nación, se logró desmantelar una red dedicada al tráfico de armas desde Florida, Estados Unidos, hacia Medellín, Colombia.
Las autoridades interceptaron dos cajas en Estados Unidos que contenían seis fusiles, mientras que en Medellín se incautaron cuatro armas de fuego en el barrio Robledo, comuna 7 de la capital antioqueña.
El modus operandi de esta organización consistía en ocultar las armas dentro de electrodomésticos, aprovechando las rutas comerciales entre ambos países para su transporte. Este método les permitía enviar el arsenal de guerra sin levantar sospechas, según detalló el general William Castaño Ramos, comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá.
Durante el operativo en el barrio Robledo, un hombre de 26 años fue capturado en flagrancia mientras recibía una encomienda proveniente de Estados Unidos. Esta captura fue parte de una serie de allanamientos que también se llevaron a cabo en la comuna de Castilla, donde se incautaron dos fusiles, dos pistolas, tres proveedores y dos equipos móviles.
El secretario de Seguridad de Medellín, Manuel Villa, destacó la importancia de esta operación para desarticular redes de tráfico de armas que afectan la seguridad de la ciudad. La colaboración internacional fue clave para el éxito del operativo, permitiendo la incautación de un arsenal significativo tanto en Colombia como en Estados Unidos.