En el desarrollo del XXI Congreso Nacional de la Infraestructura en Cartagena, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, destacó el crecimiento significativo de las plataformas digitales de suerte y azar en el país, lo que ha puesto en el centro del debate la necesidad de gravar esta modalidad de apuestas con el Impuesto de Valor Agregado (IVA).
Según el ministro, estas plataformas pasaron de facturar $16 billones en 2022 a 36 billones en 2023, por lo que ya han alcanzado $25 billones a agosto de 2024, con proyecciones de cerrar el año en $45 billones. Bajo este panorama, Bonilla insistió en que a este tipo de apuestas se les aplique el mismo impuesto que pagan las apuestas físicas.
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Destacó que resulta “incoherente” que los juegos de azar físicos estén sujetos a impuestos mientras que las plataformas digitales no lo están. “Es absolutamente ilógico que no estén pagando impuestos cuando es un negocio real”, afirmó el ministro, señalando que actualmente solo pagan el impuesto de renta.
Añadió que el IVA sería pagado por los apostadores, no por las plataformas, lo que ha generado resistencia por parte de las empresas del sector. Bonilla dijo que las empresas están “magnificando la idea de que se van a quebrar porque van a pagar el IVA, ellos no pagan IVA”.
A su vez, cuestionó que en el Congreso no haya una puja por aprobar dicho impuesto: “Es bueno aclarar que una cosa es ser recaudador y otra cosa es el que paga el impuesto. El que lo paga es el apostador; entonces, el que quiera apostar que pague el IVA. Sería bueno saber cuál es el lobby que están haciendo las casas de apuestas en el Congreso para que esto no se no se apruebe”. La discusión sobre la reforma tributaria continúa en el Congreso, con la expectativa de que la primera ponencia esté lista para el lunes 2 de diciembre.
Cabe señalar que desde hace meses surgió la propuesta del Gobierno de aplicar un impuesto del 19% a las apuestas en línea. Esta medida, que formará parte de la nueva reforma tributaria, busca recaudar $2,1 billones; sin embargo, la industria ha expresado su preocupación por el “impacto” que podría tener en los empleos y en el funcionamiento del negocio.
Evert Montero, presidente de la Federación Colombiana de Empresarios de Juegos de Suerte y Azar (Fecoljuegos), advirtió en declaraciones a El Colombiano, que la implementación de este impuesto podría poner en riesgo aproximadamente 150.000 empleos directos e indirectos que el sector genera.
Montero argumentó que el Gobierno no comprende adecuadamente el modelo de negocio de las plataformas de apuestas, ya que los depósitos de los usuarios no son ingresos para las casas de apuestas, sino créditos en la plataforma.
“Generamos recursos por alrededor de $400.000 millones, que es la cifra real, y en empleo alrededor de 150.000 entre directos e indirectos. Queremos hacerle entender al Gobierno la realidad del modelo de negocio de esta actividad, porque siendo ellos los dueños del monopolio parece que no conocieran cómo funciona ni cuál es la lógica financiera”, expresó el líder gremial.
También señaló que la base sobre la cual se pretende recaudar los $2,1 billones no es real, ya que el dinero de las apuestas no entra a las empresas ni incrementa su patrimonio.
“No entienden que en las apuestas online los depósitos realizados por los usuarios no constituyen un ingreso para las casas de apuestas, sino que son créditos en la plataforma o de participación y no pueden tomar la base de las apuestas para decir que se van a recaudar $2,1 billones porque ese no es un dinero real, no existe. Esa propuesta específica en la ley de financiamiento no es real, porque ese dinero no entra a las empresas y no incrementa el patrimonio”, puntualizó al medio mencionado.