Tras salida de Armando Benedetti de la FAO, le hicieron las cuentas al Gobierno Petro: esto costó reabrir la embajada

El saliente ministro ante Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura, será a partir del martes 26 de noviembre asesor en materia política del presidente de la República y subalterno de la actual directora del Dapre, Laura Sarabia

Guardar
Esta es la reunión en la que el saliente embajador de la FAO, Armando Benedetti, entregó el cargo al presidente de la República, Gustavo Petro, con Laura Sarabia como testigo - crédito Presidencia
Esta es la reunión en la que el saliente embajador de la FAO, Armando Benedetti, entregó el cargo al presidente de la República, Gustavo Petro, con Laura Sarabia como testigo - crédito Presidencia

Con la salida de Armando Benedetti como embajador de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés), se empezó a reestructurar el organigrama del Estado, en relación con los movimientos con los cuales el movimiento progresista empezará a preparar las elecciones del 2026: y la firme intención de continuar en el poder más allá del 7 de agosto del 2026, cuando el actual presidente, Gustavo Petro, entregue el poder.

Benedetti se reunió el lunes 25 de noviembre del 2024 con el jefe de Estado en la Casa de Nariño, y la directora del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), Laura Sarabia, en un cónclave en el que se definió, además de su salida, que había sido adelantada por el diplomático, su llegada al gabinete; aunque en calidad de asesor, como él mismo lo dijo, con “oficina al lado de Petro y Sarabia”, en el tercer piso de la residencia del primer mandatario.

Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel.

Durante su corta gestión, que fue de 10 meses, Benedetti fue objeto de toda clase de diversas controversias y críticas, tanto por su designación como por los costos asociados al restablecimiento de la embajada de la FAO en Roma, cerrada en 1999 bajo la administración de Andrés Pastrana por razones presupuestales. El hombre, acostumbrado a dar de qué hablar por su proceder, había dicho a la prensa que venía a darle una mano al Gobierno en “temas nacionales”.

Armando Benedetti es, sin lugar a duda, uno de los funcionarios más polémicos del Gobierno de Gustavo Petro - crédito Miguel Gutiérrez/EFE
Armando Benedetti es, sin lugar a duda, uno de los funcionarios más polémicos del Gobierno de Gustavo Petro - crédito Miguel Gutiérrez/EFE

¿Cuánto le ha costado la apertura de la embajada de Colombia ante la FAO?

En cuanto a los costos, fue motivo de crítica por varios actores políticos. Desde su apertura, la embajada ya ha costado al país más de 1.200 millones de pesos, de acuerdo con la senadora María Fernanda Cabal del Centro Democrático. Además, entre sueldo y bonos para Benedetti, se han pagado unos $518 millones.

Además, entre el 1 de abril de 2024 y el 30 de abril de 2024, se arrendó un bien inmueble para uso residencial de Benedetti en Roma, por el valor de 10.000 euros, es decir, $46.727.348; mientras que el conjunto de gastos por su nueva residencia ascendió a 136.800 euros anuales. A su vez, para el nuevo domicilio del diplomático, reveló Cabal, se pagó una comisión de 13.200 euros, es decir, unos 61.680.099 al cambio, lo que despertó toda clase de críticas.

Lo más preocupante, es que, según datos recolectados por El Tiempo, entre el 24 de junio y el 10 de julio de 2024, el Ejecutivo destino más de $800 millones a la misión diplomática ante la FAO. Los giros, agregó el medio citado, fueron hechos por el Ministerio de Relaciones Exteriores y representan el 53% del presupuesto total del año, en cifras que alimentaron aún más la polémica con respecto a la variable entre gastos del Gobierno y retribución en inversiones en favor del Estado.

Armando Benedetti había tomado posesión como embajador ante la FAO en febrero de 2024 - crédito X
Armando Benedetti había tomado posesión como embajador ante la FAO en febrero de 2024 - crédito X

El nombramiento de Benedetti había sido polémico desde el inicio. Presentó sus credenciales en mayo de 2024, cuando ya llevaba casi dos meses en el cargo, tras su remoción como embajador en Caracas (Venezuela), en un contexto de críticas por su papel en la campaña del jefe de Estado y las sospechas sobre la financiación. Además de sufrir el escrutinio público, su tiempo en Roma se vio empañado por un escándalo personal de presunta violencia de género.

En efecto, a Benedetti se le acusa de haber agredido verbal y físicamente a su exesposa, Adelina Guerrero Covo, en un episodio registrado el 30 de junio en Madrid (España). Por ello, se abrió una investigación disciplinaria sin resolución por parte de la Cancillería.

Lamentamos que un asunto de índole personal haya trascendido al ámbito público y afectado la imagen internacional de Colombia. Este caso pone de relieve la necesidad de fortalecer la carrera diplomática y consular colombiana, basándola en méritos y principios éticos sólidos”, expresó la Asociación Diplomática y Consular de Colombia (Asodiplo), en lo concerniente a este caso.

A pesar de las críticas, el funcionario sacó a relucir lo que serían avances de su administración, como la confirmación de que Colombia será sede de la Conferencia de Reforma Agraria de la FAO en 2026 y la aprobación del plan estratégico del Programa Mundial de Alimentos (PMA) para Colombia 2025-2028, con un presupuesto de 592 millones de dólares. Sin embargo, estos logros quedaron eclipsados por el escándalo y el gasto económico implicado en su gestión.

Guardar