Barranquilla fue escenario de un operativo policial que resultó en la incautación de 70 kilos de pólvora destinados a las festividades navideñas. La intervención se llevó a cabo en el barrio Las Palmas, donde un vehículo fue detenido por la Policía de Tránsito en la calle 30 con carrera 8. Durante la inspección, se descubrió una gran cantidad de material pirotécnico, según informaron las autoridades.
El mayor Billy Junco, jefe seccional de Tránsito y Transporte de la Policía Metropolitana de Barranquilla, explicó que el objetivo de estos operativos es prevenir accidentes por quemaduras, especialmente en niños y adultos, durante la temporada decembrina. Junco instó a la ciudadanía a reportar cualquier actividad sospechosa relacionada con la venta de pólvora a través de la línea 123.
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Entre los artículos incautados se encontraban 150 velones, 30 tiros, 2.169 cajas de chispita, 7.200 martinicas y 600 mini volcanes. Estos productos, que suelen ser utilizados durante las celebraciones navideñas, fueron puestos a disposición de las autoridades competentes para su manejo adecuado.
Simultáneamente, la Policía de Córdoba incautó más de 700 unidades de pólvora en el municipio de Planeta Rica, según informaron las autoridades. Este material pirotécnico, igualmente destinado a las festividades navideñas, fue interceptado mientras era transportado en un vehículo Renault por la carretera que conecta Planeta Rica con la ciudad de Sincelejo, en el departamento de Sucre.
La operación fue llevada a cabo por unidades de la Seccional de Tránsito y Transporte del Departamento de Policía Córdoba, que señalaron que la incautación está valorada en aproximadamente 2.500.000 pesos colombianos. Entre los elementos confiscados se encuentran mini volcanes, mini cohetes, chispitas, culebrillas y cajas de chispitas mariposas, entre otros.
Las autoridades explicaron que la acción se realizó debido a la violación de la Norma Técnica NTC 3966, que regula el transporte de mercancías peligrosas, en concordancia con el artículo 30, literal 1, de la Ley 1801. Este marco legal busca garantizar la seguridad en el manejo y transporte de materiales que puedan representar un riesgo para la población.
El material incautado fue puesto a disposición de la autoridad competente para su manejo adecuado. Además, la Policía de Córdoba instó a la ciudadanía a denunciar cualquier lugar donde se almacene o distribuya material pirotécnico de manera ilegal, con el fin de prevenir accidentes y garantizar la seguridad durante las celebraciones de fin de año.
De igual manera, las autoridades intensificaron los controles en las calles ante la proximidad de diciembre, un mes en el que tradicionalmente aumenta el uso de pólvora a pesar de las restricciones vigentes. Estos esfuerzos buscan reducir el riesgo de accidentes y garantizar la seguridad de la población durante las festividades.
Cifras de quemados con pólvora
Durante la temporada de fin de año, las autoridades sanitarias de Colombia expresaron su preocupación por el aumento de casos de lesiones causadas por el uso de pólvora. Según el Ministerio de Salud y el Instituto Nacional de Salud (INS), del 1 de diciembre de 2023 hasta el 14 de enero de 2024, se registraron 693 personas lesionadas por pólvora, de las cuales 228 fueron menores de edad. Este incremento representa 50 casos más que en el mismo periodo del 2022.
El director del INS, Giovanny Rubiano, enfatizó la importancia de evitar la manipulación de pólvora, destacando que las áreas más afectadas por estas lesiones suelen ser la cara, los ojos, el cuello y las manos. Rubiano subrayó la necesidad de proteger especialmente a los niños, quienes son los más vulnerables a sufrir daños graves.
Los datos del INS revelan que la mayoría de las lesiones por pólvora ocurrieron durante la manipulación de elementos pirotécnicos (65,8%), mientras que un 25,7% se produjeron al observar estos elementos, y un 6,1% en otras actividades relacionadas.
En cuanto a la gravedad de las lesiones, las quemaduras de primer grado son las más comunes, representando el 47,5% de los casos, seguidas por las de segundo grado con un 47%. Aunque las quemaduras de tercer grado, que son las más severas, constituyen solo el 5,5%, estas siguen siendo motivo de gran preocupación debido a su potencial para causar daños permanentes.