La comuna 3 de Medellín, específicamente el barrio Manrique, fue el epicentro de un megoperativo el lunes 25 de noviembre, en el que un centenar de policías y funcionarios de la alcaldía tomaron las calles con el objetivo de fortalecer la seguridad y restablecer el orden en una zona que, en los últimos meses, experimentó una serie de desafíos en materia de criminalidad.
El operativo, que hace parte de una ofensiva más amplia para combatir las estructuras criminales en el nororiente de la ciudad, contó con el respaldo de varias entidades locales. Entre ellas, las secretarías de Seguridad, Movilidad, y Control Territorial, junto a socorristas del Cuerpo de Bomberos, que se sumaron para garantizar el éxito de la jornada.
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Uno de los aspectos más destacados fue el resultado en materia de seguridad. Según los reportes oficiales, la policía logró la captura de dos personas por la fabricación y porte de drogas ilegales. Esta intervención también derivó en la incautación de al menos 16 armas blancas y la imposición de 17 comparendos relacionados con la convivencia y seguridad ciudadana.
“Hace unos días, junto al alcalde Federico Gutiérrez y el general Castaño, anunciamos en Manrique un golpe contra la estructura criminal La Marina. Hoy volvemos para reafirmar nuestro compromiso de garantizar la tranquilidad de la comunidad. Los recientes homicidios no quedarán impunes; vendrán más capturas y operativos. Aquí no hay lugar para la impunidad: entenderán por las buenas o con la fuerza de la ley”, destacó Manuel Villa Mejía, secretario de Seguridad de Medellín, durante el operativo.
Además de la acción contra la delincuencia común, el operativo también se centró en mejorar las condiciones de movilidad en la zona. Se impusieron más de 60 comparendos a infractores de las normas de tránsito, y se realizaron inspecciones a cerca de 180 motos y 35 vehículos. De estos, 21 motos y un carro fueron detenidos por diversas irregularidades. Esta medida forma parte de un esfuerzo integral para recuperar la movilidad en el sector y reducir la congestión en una de las áreas más afectadas por el desorden vial.
El brigadier general William Castaño Ramos, comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, aseguró que este operativo no será aislado, sino que hace parte de una serie de acciones continuas dirigidas a garantizar la seguridad en Manrique y las zonas aledañas. Esta estrategia busca generar un impacto duradero en la comunidad, donde los niveles de violencia causaron gran preocupación en las últimas semanas.
Uno de los factores que motivó la intensificación de los operativos fue el asesinato de Fabián Enrique Grisales Parra, un hombre de 33 años, ocurrido en el barrio Manrique Oriental. Grisales fue atacado a balazos por dos hombres que viajaban en moto, quienes huyeron rápidamente tras el crimen. Este asesinato se suma a otros hechos violentos que sacudieron la comuna, aunque las autoridades destacan que, a pesar de los homicidios recientes, los índices de criminalidad mostraron una leve disminución en comparación con 2023.
De acuerdo con las estadísticas de la Secretaría de Seguridad de Medellín, durante 2024 se registraron 14 homicidios en Manrique, lo que representa una disminución del 36% en comparación con el mismo periodo de 2023, cuando se registraron 22 muertes violentas. Además, otros delitos como el hurto a personas (-29%), el hurto de motos (-23%) y el hurto en residencias (-29%) mostraron una notable reducción, reflejando el impacto positivo de las acciones de seguridad en la zona.
Sin embargo, algunos delitos, como la extorsión (10,34%) y el hurto de carros (56,5%), aumentaron, lo que plantea nuevos retos para las autoridades locales. Las autoridades de Medellín reiteraron su compromiso de seguir adelante con los operativos de seguridad en Manrique y otras comunas del nororiente de la ciudad.