Defensa de Daniel Sancho logró tercera prórroga del recurso de apelación: busca que se reconsidere su condena de cadena perpetua

Daniel Sancho, condenado a cadena perpetua en Tailandia por el asesinato del cirujano colombiano Edwin Arrieta, obtuvo una tercera prórroga para presentar su recurso de apelación.

Según informó EFE, el equipo legal de Sancho tenía inicialmente hasta el 29 de noviembre para presentar la apelación ante el Tribunal Provincial de Samui, pero ahora cuenta con un nuevo plazo hasta el 29 de diciembre.

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El caso de Sancho, que fue declarado culpable de asesinar premeditadamente a Arrieta el 2 de agosto de 2023 en la isla de Phangan, captó la atención internacional.

La sentencia sostiene que Sancho golpeó al cirujano con intención de matar y preparó el crimen con la compra de cuchillos y otros elementos. Sin embargo, la defensa argumenta que la muerte ocurrió durante una pelea en la que Sancho actuó en defensa propia.

El abogado de oficio Apirchat Srinual representó a Sancho durante el juicio en Samui, y el equipo legal en Tailandia, con el apoyo de asesores en España como Ramón Chippirrás y Carmen Balfagón, sigue trabajando en el recurso. Chippirrás indicó a EFE que esperan tener el recurso listo para el final de la nueva prórroga, aunque no descartan solicitar más tiempo si es necesario.

“Esperamos poder tenerlo (el recurso) para el final de esta nueva prórroga, el 29 de diciembre, sin descartar que haya que pedir una nueva”, expresó Ramón Chippirrás.

En Tailandia, solo los abogados locales pueden ejercer en los tribunales, lo que llevó a Sancho a contar con la asesoría de Alice Keartjareanlap, una abogada de confianza del padre del condenado, el actor español Rodolfo Sancho.

La defensa ya había solicitado extensiones en dos ocasiones anteriores, antes de que expiraran los plazos iniciales del 29 de septiembre y el 29 de octubre.

El tribunal de Samui confirmó a EFE que los aplazamientos están permitidos sin un límite específico, dependiendo de la consideración del juez. Sancho fue trasladado a la prisión de Surat Thani el 30 de agosto, un día después de la lectura de la sentencia. La defensa busca que el caso sea reconsiderado como homicidio imprudente, lo que podría facilitar una eventual repatriación a España.

El caso de Sancho ha generado un amplio debate sobre la justicia tailandesa y las posibilidades de apelación en casos de condenas severas. La defensa continúa recopilando pruebas y argumentos para fortalecer su posición, mientras el tiempo corre hacia la nueva fecha límite del 29 de diciembre.

Daniel Sancho, fue condenado a cadena perpetua por el asesinato premeditado del cirujano colombiano Edwin Arrieta, según una sentencia divulgada el 13 de septiembre. El tribunal determinó que Sancho golpeó a Arrieta con la intención de matarlo, además de haber planificado el crimen mediante la compra de herramientas como cuchillos y una sierra, así como bolsas de plástico, un día antes del asesinato.

El fallo, que consta de 47 páginas, fue leído en una audiencia a puerta cerrada el 29 de agosto. La sentencia destaca que Sancho golpeó la cabeza de Arrieta contra el borde del fregadero, lo que refuerza la conclusión del tribunal sobre su intención de matar. La defensa de Sancho había argumentado que la muerte fue accidental durante una pelea, pero el tribunal rechazó esta versión.

A pesar de la condena, la sentencia reconoce que no se pudo determinar con precisión la causa de la muerte debido a la falta de partes clave del cuerpo de Arrieta, quien fue descuartizado y cuyos restos fueron dispersados en varios lugares de la isla de Koh Phangan, donde ocurrió el crimen.

En cuanto al motivo del asesinato, la sentencia sugiere que Sancho y Arrieta mantenían una relación sentimental que el español decidió terminar meses antes del crimen. Arrieta, al parecer, no aceptó esta decisión y amenazó con revelar secretos y matar a Sancho, lo que habría motivado el acto violento.

La defensa de Sancho también alegó que actuó en defensa propia ante un intento de violación por parte de Arrieta, pero el tribunal desestimó esta afirmación por considerarla poco creíble. La confesión inicial de Sancho ante la policía, en la que admitió haber asesinado a Arrieta, fue considerada veraz por el tribunal, ya que se realizó poco después del crimen y se le proporcionó asesoría legal y un intérprete durante el interrogatorio.

La confesión y el reconocimiento de culpabilidad en el descuartizamiento de Arrieta fueron considerados atenuantes para conmutar la pena de muerte por cadena perpetua. La sentencia también declara a Sancho culpable de ocultación del cadáver y destrucción de documentación ajena, específicamente el pasaporte de Arrieta.

Tras conocerse la sentencia, Sancho fue trasladado a la prisión de Surat Thani, una de las más seguras de ese país asiático.