El director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd) denunció el domingo 24 de noviembre que las casas que entregó el Gobierno del expresidente Iván Duque en el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina tras el paso del huracán Iota en 2020 no soportarían otra de estas catástrofes naturales.
La advertencia del alto funcionario del Gobierno Nacional la hizo luego de que en la isla de San Andrés, durante el fin de semana, se reportaran vendavales que, presuntamente, afectaron las viviendas que les entregaron a los habitantes en la anterior administración.
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”Hoy en Providencia vientos de menos de 30 km/h causaron desprendimientos de cubiertas y afectaciones estructurales en varias casas. ¿Qué podría pasar con vientos huracanados de más de 120km/h? (sic)”, cuestionó desde su cuenta oficial de la red social X.
En el mismo trino, Carrillo anexó fotografías de los daños que provocaron los vendavales en algunas casas del territorio insular y señaló que en su momento fueron “intervenidas” por Financiera de Desarrollo Territorial (Findeter) durante la reconstrucción que llevó a cabo el Gobierno Duque.
Además, anunció que desde la entidad que tiene a cargo le realizarían una evaluación a las viviendas, pero expresó su preocupación por los pocos recursos que se tendrían ante eventuales intervenciones que tuvieran que hacerle para reforzarlas ante eventuales huracanes.
“Los reclamos de la comunidad raizal han sido siempre justos, le corresponde hoy a la @UNGRD realizar un peritaje completo de las casas y garantizar la seguridad de las viviendas, el problema es la plata. Urge garantizar los recursos desde @MinHacienda y también el cumplimiento por parte de Findeter (sic)”, conminó.
Carrillo recordó la catástrofe que dejó Iota
El huracán Iota dejó una marca imborrable en el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina hace cuatro años, cuando azotó la región el 16 de noviembre de 2020. El fenómeno natural causó una devastación casi total en Providencia, donde el 98% de la infraestructura fue destruida.
Este evento expusó la histórica desatención hacia este departamento colombiano, y aún hoy, miles de familias continuaban sufriendo las consecuencias de la tragedia.
Bajo ese contexto Carrillo recordó en su cuenta de X el impacto de ese fenómeno natural, y lo describió como una lucha entre la vida y la muerte, luego de que estuviera recientemente en el archipiélago.
“Lo que encontré en mi visita a Providencia es una isla que aún no se recupera de la tragedia del huracán Iota y una reconstrucción que no dejó satisfecha al pueblo raizal. El tamaño de la zona segura es realmente diminuto, la calidad de las maderas ya empieza a mostrar deficiencias”, señaló en una entrevista que concedió en la emisora La W Radio.
Carrillo enfatizó que el país aún no comprendía completamente a magnitud de la catástrofe. Durante casi un día entero, los habitantes de las islas enfrentaron vientos huracanados e inundaciones devastadoras, lo que mantuvo a la población en constante estado de alerta.
El plan de reconstrucción, liderado por la Unidad de Gestión del Riesgo y ejecutado por los gobiernos de Iván Duque y Gustavo Petro, había sido objeto de críticas por parte de la comunidad local. Aunque la administración anterior afirmó haber completado el 94% del plan, los residentes expresaron su descontento con los avances y la efectividad de las medidas implementadas.
El huracán Iota fue el último registrado en esa temporada, y su paso por Colombia dejó una huella profunda en la memoria colectiva del país.
La tragedia resaltó no solo la vulnerabilidad de las islas ante fenómenos naturales, sino también la necesidad de una atención sostenida y efectiva por parte del gobierno para mitigar los riesgos futuros y apoyar a las comunidades afectadas.