En la tarde del lunes 25 de noviembre de 2024, se confirmó una de las modificaciones en el Gobierno del presidente Gustavo Petro que más ha llamado la atención en los últimos meses, el regreso al país de Armando Benedetti.
El anuncio lo había adelantado Benedetti, que aseguró que dejaría su cargo como embajador de Colombia ante la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO por sus siglas en inglés), para convertirse en asesor del presidente Petro.
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Y aunque uno de los problemas que tendría la vinculación de Armando Benedetti al Gobierno nacional serían las diferencias con la directora del Departamento Administrativo de Presidencia (Dapre), Laura Sarabia, fue el mismo exembajador el que confirmó que su oficina estará ubicada en el tercer piso de la Casa de Nariño, sede desde la que despacha el presidente Petro.
Así lo dio a conocer el nuevo asesor presidencial ante los medios al asegurar que: “Yo empiezo mañana y la oficina mía va a quedar cerca a la de Laura Sarabia y a la del presidente de la República”.
Qué va a hacer Benedetti en el Gobierno
El embajador saliente de Colombia en Venezuela, Armando Benedetti, en entrevista con Caracol Radio, explicó los motivos de su vinculación con el Gobierno y abordó temas relacionados con su salud mental, su rol en la administración y las controversias que lo han rodeado en el pasado.
Benedetti declaró que su retorno se debe a una invitación directa del presidente Petro: “Llegué aquí como asesor político, y el presidente me hizo un llamado para trabajar en esta función”.
El embajador añadió que mantuvo una reunión de cerca de dos horas con el primer mandatario en la que discutieron diversos temas, incluidos los retos del Gobierno frente al Congreso, aunque también estuvo presente Laura Sarabia, asesora clave en el círculo presidencial, con la que Benedetti tendrá que trabajar en equipo.
Benedetti destacó su intención de contribuir al manejo de las relaciones del Gobierno con el Legislativo y aseguró que su experiencia puede ser clave para avanzar en las reformas prioritarias de la administración.
“Siempre he tenido una relación cercana con el presidente. Nos escribimos con frecuencia, incluso en los momentos en que no estaba oficialmente vinculado al Gobierno”, afirmó Benedetti, que agregó que su relación con Petro está basada en la confianza y la amistad.
Salud mental y rehabilitación
Durante la entrevista, Benedetti reveló que estuvo 35 días internado.
Al respecto, reconoció que este aspecto ha generado críticas y estigmatización, pero subrayó que su salud mental no afecta su capacidad profesional: “Nunca he dejado de cumplir con mis responsabilidades laborales por razones personales”.
El nuevo asesor también insistió en la importancia de abordar la salud mental como un tema de salud pública, mencionando que, según la Organización Mundial de la Salud, se trata de una condición que debe ser tratada sin prejuicios.
Sobre el incidente de violencia intrafamiliar que lo involucró en España, Benedetti negó rotundamente las acusaciones y argumentó que todo se trató de un malentendido mediático: “Un juez en Madrid concluyó que no hubo maltrato físico ni psicológico. Fue un problema familiar magnificado por algunos medios de comunicación”.
Polémicas pasadas y su regreso al Gobierno
El embajador también abordó la controversia por los audios filtrados que lo vincularon con declaraciones comprometedoras mientras ejercía como embajador.
Según Benedetti, esos audios correspondían a conversaciones privadas que no reflejan su desempeño profesional: “Esos audios no son un pronunciamiento oficial, sino una conversación personal que se filtró sin mi autorización. Es injusto que se utilicen para cuestionar mi capacidad profesional”, explicó.
En cuanto a su posible rol en una eventual reelección del presidente Petro, Benedetti descartó tal posibilidad, enfatizando que la Constitución no lo permite: “Ayudaré al presidente en lo que esté dentro del marco de la ley, pero la reelección no está contemplada ni en sus planes ni en los míos”.