María Fernanda Cabal cuestionó al presidente por el número de soldados muertos en Antioquia: “La paz cocal de Petro”

El ataque del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en Anorí, Antioquia, que cobró la vida de cinco soldados y dejó a cuatro personas heridas, provocó críticas hacia la estrategia de Paz Total del Gobierno de Gustavo Petro. La senadora María Fernanda Cabal, del partido Centro Democrático, cuestionó la efectividad de esta política en un contexto de creciente violencia contra las Fuerzas Armadas.

El enfrentamiento ocurrió en la vereda La Plancha, donde las víctimas protegían a excombatientes en proceso de reincorporación. Según el Ejército Nacional, el ataque fue ejecutado con explosivos ilegales por integrantes del Frente de Guerra Darío Ramírez del Ejército de Liberación Nacional (ELN).

Entre los fallecidos se encuentran el cabo segundo Fredys David Robles Romero y los soldados profesionales Carlos Andrés Ramos Martínez, Iván Darío Reina Carabalí y Fabián José Regino Mora; sin embargo, la identidad de la quinta víctima aún no ha sido revelada.

Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel.

Los heridos, tres uniformados y un civil, fueron trasladados a un hospital en Medellín, mientras las autoridades coordinaron el apoyo aéreo y terrestre para evacuar a los afectados. El Ejército señaló que este acto constituye una grave violación al derecho internacional humanitario y anunció denuncias ante instancias nacionales e internacionales.

Por su parte, la senadora opositora María Fernanda Cabal cuestionó directamente la eficacia de la política de Paz Total, enfatizando que los actos violentos de grupos armados deslegitiman cualquier intento de negociación que quiera llevar el presidente Petro.

“La paz cocal de Petro. Cobrando la vida de nuestros héroes. Nuestra solidaridad con las familias y el Ejército Nacional en un día tan difícil como hoy. El único diálogo que debe existir debe ser entre los criminales, los fiscales y los jueces en los procesos judiciales para llevarlos a la cárcel”, publicó la senadora en la res social.

Su crítica refleja la postura de su partido, que ha rechazado constantemente los diálogos con organizaciones insurgentes bajo el argumento de que fortalecen a los grupos armados ilegales.

El pronunciamiento de la senadora generó un amplio debate en redes sociales. Por un lado, numerosos usuarios respaldaron sus declaraciones, aplaudiendo que cuestionara la eficacia de la política de paz del presidente Petro; sin embargo, otros usuarios recurrieron a argumentos históricos, al señalar que en administraciones pasadas, centradas en políticas de seguridad, no solo se registraron bajas en las filas militares, sino la muerte de miles de jóvenes civiles inocentes; recordaron los casos de ejecuciones extrajudiciales, mal llamados ‘falsos positivos’.

Estos fueron algunos de los comentarios que más se destacaron: “La paz de Petro, es la paz de los sepulcros”; “Legalización para las drogas e impuestos para cerrar las brechas sociales Colombia ha sido un Estado genocida en todas sus versiones constitucionales”; “Eso mismo no decía con los 6.402 falsos positivos”; “La policía y el ejército están con las manos atadas y lo peor es que quienes los dirigen son arrodillados ante el guerrillero, qué corrupción”.

Un ataque terrorista atribuido al ELN cobró la vida de tres soldados y dejó a cinco más heridos, junto con un civil afectado, en el municipio de Anorí, ubicado en el Nordeste antioqueño. El atentado, ocurrido en la mañana del jueves 21 de noviembre, estuvo dirigido contra tropas desplegadas en los Antiguos Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación (Aetcr) “La Plancha”.

La información fue confirmada por el gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón Cardona, a través de su cuenta en la red social X. EL líder señaló que los responsables del ataque son miembros del ELN que operan en colaboración con el Estado Mayor Central (EMC), una disidencia de las Farc.

El contexto en Anorí ha sido especialmente complejo en los últimos meses debido a enfrentamientos entre grupos armados ilegales que disputan el control de la minería ilegal en la región. Según la Defensoría del Pueblo, estos conflictos han causado el desplazamiento forzado de 88 familias.

En respuesta a la creciente violencia, el Ejército Nacional desplegó esta semana un contingente de 200 soldados para reforzar la seguridad en las zonas rurales del municipio; sin embargo, el ataque evidencia las dificultades para garantizar la tranquilidad en estas áreas estratégicas.

El gobernador Rendón, que insistió en la falta de compromiso de los grupos guerrilleros con el proceso de paz, reiteró su postura ante este nuevo hecho violento. “Una vez más, estos delincuentes demuestran que no tienen voluntad de paz”, concluyó.

Las autoridades continúan evaluando la situación y mantienen operativos en la zona para restablecer el orden público y garantizar la seguridad de los habitantes.