Así serán las lluvias en Bogotá y las principales ciudades de Colombia este jueves 21 de noviembre: dónde sacar el paraguas

Los primeros veinte días de noviembre estuvieron marcados por las lluvias en gran parte del territorio nacional y, el día 21, según el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) no será la excepción.

La temporada de ciclones tropicales y otros fenómenos como la llegada de la oscilación de Madden and Julian, la vaguada monzónica y la zona de confluencia intertropical provocarían un aumento en las precipitaciones, sumado a la segunda temporada de lluvias que va de octubre a noviembre.

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En Bogotá, por ejemplo, se registró durante la madrugada un “cielo entre parcial a mayormente nublado y predominio de tiempo seco en gran parte de la ciudad, salvo por lluvias ligeras puntuales en el norte y centro de la capital. La temperatura mínima fue de 10 °C”, de acuerdo con el reporte del Ideam.

En la mañana se mantiene el pronóstico de cielo entre mayor a parcialmente nublado con predominio de tiempo seco, pero en la tarde podrían registrarse lluvias en las localidades de Usaquén, Suba, Barrios Unidos, Engativá, Fontibón y Kennedy, con mayor fuerza en el norte y occidente de la capital colombiana.

Ya en la noche, predominará un cielo mayormente nublado, con tiempo seco y máximas de 18 °C, aunque no se descartan lluvias ligeras.

El pronóstico para Medellín el jueves 21 de noviembre es de lluvias al finalizar la tarde e iniciar la noche, con máximas de 27 °C; igual que en Cali. En Barranquilla se prevé tiempo seco con cielo parcialmente nublado y máximas de 31 °C; uno menos que en Cartagena, donde también será difícil ver el azul del cielo caribeño.

Bucaramanga podría tener lluvias en la tarde, con máximas por los 25 °C y, finalmente, en Tunja se espera un cielo parcial a mayormente nublado con tiempo seco, aunque no se descartan precipitaciones en la noche.

La directora del Ideam, Ghisliane Echverry Prieto, explicó que las lluvias de la temporada se han visto intensificadas por la temporada de ciclones tropicales, “una temporada que empezó desde el primero de junio y se extiende hasta el 30 de noviembre (...) Durante esta temporada se instalan ondas tropicales y perturbaciones que tienen impactos, más especialmente en la región Caribe, relacionados con el aumento de precipitaciones, velocidad de los vientos y oleaje”.

Además, “tenemos una oscilación de Madden and Julian en una fase convectiva. (...) En este momento se está instalando con alta intensidad sobre gran parte del territorio colombiano y esta oscilación, en esa fase, es favorable para las lluvias. Se espera que continúe durante algunas semanas más en el territorio”.

En Colombia, el invierno parece haberse desplazado un mes, según el meteorólogo Max Henríquez, quien explicó a Infobae que “noviembre se está comportando como octubre, y diciembre podría comportarse como noviembre”. Este cambio ha provocado preguntas entre los colombianos sobre si el fenómeno de La Niña estaría influenciando la situación climática del país.

No obstante, Henríquez aclaró que las lluvias recientes corresponden a la temporada invernal habitual que se da en el país dos veces al año: entre abril y mayo, y entre octubre y noviembre. Estas lluvias han sido responsables de numerosos desastres hidrometeorológicos, como avalanchas, crecientes de ríos y deslizamientos de tierra. “En Colombia, cuando llueve, normalmente, los desastres se multiplican porque las lluvias en el país causan desastres hidrometeorológicos”, explicó Henríquez.

Más de 900.000 corrientes de agua descienden de las cordilleras, la Sierra Nevada de Santa Marta y la Sierra del Perijá, intensificando los riesgos durante las lluvias o en presencia de fenómenos climáticos como La Niña. Según Henríquez, “se producen avalanchas, crecientes y desbordamientos, cuando al lado de los ríos habitan millones de personas. A lo largo del Magdalena y del Cauca, por ejemplo, hace unos años vivían dos millones de personas, todas en condiciones vulnerables frente a las lluvias”.

Predicciones encontradas sobre La Niña

Dos de los principales centros de predicción climática mantienen posturas opuestas sobre la llegada de La Niña. El Climate Prediction Center de la Noaa sugiere que este fenómeno podría presentarse hacia finales de 2024 y comienzos de 2025, aunque con menor intensidad. Por otro lado, el International Research Institute for Climate and Society (IRI) de la Escuela Climática de Columbia asegura que ni El Niño ni La Niña se desarrollarán hasta al menos el primer trimestre de 2025, ya que las temperaturas oceánicas se mantendrán estables.

Henríquez enfatizó que para que La Niña se consolide, debe haber una interacción específica entre el océano y la atmósfera. Este fenómeno requiere que los vientos alisios sean más fuertes y que las corrientes frías de Humboldt se desplacen hacia el norte, extendiéndose al centro del océano. Sin embargo, durante 2024, la atmósfera ha mostrado un comportamiento “muy fluctuante”, lo que dificulta la formación de La Niña.