Venezolano de 63 años ofrecía dulces a tres niñas para abusar sexualmente de ellas

Un nuevo caso de abuso sexual infantil encendió las alertas en los hogares colombianos, pues fue cometido por un vecino de las víctimas, que eran tres hermanitas, de tan solo 4, 7 y 10 años, que se quedaban solas en su vivienda, teniendo en cuenta que sus padres se iban a trabajar.

El agresor fue identificado como Freddy Antonio Tovar, un ciudadano venezolano de 63 años, que vivía en el barrio Alcaraván de Puerto Carreño, Vichada, y era vecino de la familia, por lo que empezó a ver las rutinas y descubrió que ellas no tenían quién las cuidara.

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De esta manera, empezó a acercarse poco a poco a las menores de edad bajo una figura de “vecino amable”, pues les regalaba dulces y otros objetos como regalos, con el fin de que las pequeñas se acercaran a él. Finalmente lo logró y en ese momento fue cuando inició el martirio para las hermanas.

De acuerdo con el reporte oficial de la Fiscalía General de la Nación, que recolectó el material probatorio en contra del ciudadano extranjero, el criminal ingresaba al lugar en el que habitaban las menores y las encerraba en su habitación para realizarles tocamientos indebidos.

Del mismo modo, el ente acusador confirmó que el sujeto se aprovechó de las menores de edad entre el 10 y el 15 de noviembre de 2022, por lo que fue enviado a audiencias en las que un juez de conocimiento decidió condenarlo a 12 años y 6 meses de prisión.

El togado determinó que el criminal era responsable de haber cometido el delito de actos sexuales con menor de 14 años agravado. El señalado fue enviado a un centro establecimiento carcelario, que será designado por las autoridades que llevan el caso.

Este caso se conoció el 20 de noviembre de 2024, un día después de que se conmemorara en Colombia el Día Internacional de la Prevención del Abuso Sexual Infantil, que fue establecido por la Fundación de la Cumbre Mundial de la Mujer, debido a que las cifras de abuso de mujeres en sus primeros años de vida continúan incrementando.

En Colombia, 2023 fue testigo de un alarmante incremento en los casos de violencia sexual contra menores de edad, con más de 32.000 casos reportados. De estos, un 84% de las víctimas fueron niñas, y un 19% presentaba alguna discapacidad. Además, el 85% de los agresores eran personas conocidas por las víctimas, y el 22% de los casos ocurrieron en el hogar de las víctimas.

La situación se agrava al considerar los casos de explotación sexual infantil, que sumaron 1.493 en el mismo año y en este delito, el 80% de las víctimas también fueron niñas. Un dato preocupante es que el 86% de estos casos de explotación se llevaron a cabo a través de Internet, y el 65% se originaron en redes sociales.

Estos datos reflejan una problemática que afecta a los menores en Colombia, donde el entorno digital se ha convertido en un espacio de riesgo significativo para la explotación sexual. Del mismo modo, las autoridades están en alerta ante la cantidad de agresores conocidos cometen estos delitos en el hogar u otros espacios que deberían ser considerados como zonas seguras para el crecimiento y desarrollo de los niños.

Los datos destacan la urgencia de abordar tanto la violencia sexual como la explotación infantil desde la educación, la vigilancia en línea y el fortalecimiento de las redes de apoyo para las víctimas y enseñar a sus familiares y comunidades a denunciar a tiempo este tipo de acciones.