Joven sufrió infarto en el Darién y ahora su familia lo busca incanzablemente: “No sabemos si está vivo”

El auge que ha tenido en los últimos meses el tapón del Darién, que es la única frontera terrestre que existe entre América del Sur y Centroamérica, ha provocado que las autoridades en Panamá y Colombia busquen mitigar el número de migrantes que llegan a diario por la selva que es considerada una de las más peligrosas en el mundo.

A diferencia de lo registrado en 2023, las cifras de llegadas a Panamá desde el Darién han disminuido en lo corrido del 2024; sin embargo, más de 244.000 personas han cumplido con esta travesía hasta el momento, de los cuales, alrededor de 185.000 son de nacionalidad venezolana.

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La nula relación diplomática que existe entre Venezuela y Panamá no solo ha evitado que el país centroamericano no pueda enviar vuelos humanitarios como si se ha registrado con connacionales de Colombia, sino que también ha provocado que los venezolanos tengan más dificultades para saber información sobre las personas que han ingresado al Darién.

En un caso de esta índole, Estefany Amaya se hizo viral por exponer a un medio local en Venezuela que no tenía información sobre su hermano, Sergio Saúl Amaya Pimiento, que ingresó a la selva el 5 de noviembre.

“Pido que lo difundamos, lo hago para encontrar a mi hermano, que se llama Sergio Saúl Amaya Pimiento, sabemos que el 5 de noviembre se adentra al Darién, pero no sabemos nada. La persona que lo acompañaba nos dijo que se desmayó y no reaccionó, por lo que tuvo que dejarlo, pero se llevó sus documentos y puso la denuncia”.

En su testimonio, Amaya indicó que el amigo de su hermano volvió con ayuda al lugar en el que había dejado el cuerpo, pero este ya no estaba y hasta la fecha “No sabemos si está vivo, estamos tratando de comunicarnos con las personas en Panamá porque el cuerpo no está donde lo habían dejado”.

Sobre Sergio Amaya, se sabe que tiene 23 años, que es oriundo de Maracaibo y que atravesó Colombia para llegar a Necoclí, ingresar a la selva y luego seguir por Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Honduras, Guatemala y México hasta llegar a la frontera con Estados Unidos.

Después de que la publicación se hizo viral, la hermana del venezolano informó que recibió una llamada en la que le informaron que él había sufrido un infarto y que fue atendido por un campamento de la ONU, pero desde ese momento no ha podido conseguir información adicional.

Los familiares de Amaya desconocen si la llamada fue de una organización real o si hay personas inescrupulosas que están buscando estafarlos por medio de su tragedia, por lo que piden ayuda de las autoridades en Colombia y Panamá para saber si en realidad su ser querido sigue con vida o no.

Debido a que la tensión entre los gobiernos de Venezuela y Panamá siguen, la representante regional interna de Estados Unidos, Marlen Piñeiro, anunció a EFE que se podrían comenzar a registrar vuelos humanitarios que llevarían a las personas venezolanas a terceros países.

“Sí, nos hemos acercado con varios países y nosotros pensamos que ya en los próximos días, semanas a más tardar, vamos a tener vías para regresar venezolanos a terceros países donde van a estar seguros”, declaró Piñeiro, que es la representante de las autoridades estadounidenses en Panamá. Además, la funcionaria también se encarga de autorizar los vuelos de deportación que se han registrado desde agosto en Panamá, que puntualizó al afirmar:“hemos hablado con varios (países)” y que en los próximos días se registrará un anuncio al respecto.