Los diálogos de paz entre el Gobierno nacional, en cabeza del presidente Gustavo Petro, y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), siguen generando incertidumbre, debido a las recientes declaraciones que dio el jefe negociador de la guerrilla, Pablo Beltrán, en relación con el futuro de las conversaciones. Según explicó, el grupo armado no firmará un acuerdo de paz con la administración actual; considera que el proceso se extenderá por más años.
“La meta inmediata es avanzar lo máximo posible, hasta 2026, cuando concluye el presente Gobierno, y dejar este proceso lo más avanzado posible para que próximos gobiernos le den continuidad”, afirmó el jefe negociador el ELN.
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Sin embargo, el primer mandatario indicó que, probablemente, no haya otros gobiernos que estén interesados en adelantar un proceso de paz con la guerrilla, por lo que la oportunidad de culminar los diálogos debería ser ignorada.
“Todos y todas las combatientes del ELN saben hoy, precisamente por que (sic) la historia es un río con muchas derivas, que se escoge el camino del padre Camilo Torres Restrepo y su amor eficaz, o el camino de Pablo Escobar. El pueblo colombiano los quiere en el camino del padre que ofreció su vida por los demás. Esto mismo me lo dijo personalmente el mismo Pablo Beltrán y se lo escuché al comandante Pizarro”, escribió el jefe de Estado en su cuenta de X.
La crisis en las conversaciones han generado cuestionamientos y críticas contra el presidente y su política de Paz Total, que se ha centrado en hacer mesas de diálogo con distintos actores armados, aunque estos no han mostrado voluntad de paz y han continuado atacando a la población civil y a la fuerza pública. El representante a la Cámara Hernán Cadavid, del Centro Democrático, se unió a la discusión, asegurando que la caída de las negociaciones con el ELN pone en evidencia el “fracaso” de la administración de Gustavo Petro.
“Estamos en presencia del mayor fracaso en política de paz del Gobierno Petro, el que había dicho que el tema del ELN lo resolvería en apenas cuatro meses. Resulta que hoy ese grupo armado al margen de la ley, un grupo ilegal, ha determinado que no negociará con el Gobierno Petro y esperará a los próximos gobiernos”, afirmó el congresista de la oposición.
Según precisó, en medio de los intentos del Gobierno nacional de lograr la paz con la guerrilla, esta ha logrado expandirse, fortalecerse y exacerbar sus acciones criminales. Pues, está reclutando de manera forzada a menores de 15 años, tiene más de 6.000 personas en sus filas armadas y hace presencia en 230 municipios del país. Además, ejerce control territorial en departamentos como Chocó, Norte de Santander y Arauca.
“Ese es el resultado de lo que Petro había llamado política de Paz Total, que resultó siendo impunidad total. Ese es el balance de Petro en su política de paz, que ha fracasado”, concluyó.
Por su parte, el coordinador del Observatorio de Paz y Conflictos del Grupo de Investigación de Seguridad y Defensa de la de la Universidad Nacional, Carlos Velandia, alertó sobre las consecuencias que tiene para el país la postura que tomó el ELN con respecto a las conversaciones de paz. La más importante se centra en la prolongación del conflicto armado, cuando existe la posibilidad de que termine.
“Tiene un impacto negativo en las otras dinámicas de paz, que buscan escapar de la violencia y de la confrontación armada (...). No se justifica la poca cooperación para que la izquierda democrática obtenga una victoria en la paz”, añadió.
Mientras tanto, el consejero comisionado para la Paz, Otty Patiño, aseguró que si el proceso de implementación de un acuerdo de paz firmado con el ELN no empieza en 2025, el Gobierno nacional habrá fallado en su intención de poner fin a la guerra con el grupo armado.