Colpensiones tiene en problemas a 6.000 colombianos que buscan pensionarse: culpan a un artículo de la reforma de Petro

Más de 6.000 colombianos que esperan pensionarse se encuentran en un limbo administrativo debido a que Colpensiones aún no les habilita el ingreso al régimen de prima media, tal y como.

A raíz de la aprobación de la Ley 2381 de 2024, “por medio de la cual se establece el Sistema de Protección Social Integral para la Vejez, la Invalidez y la Muerte”, más conocida como reforma pensional, que se basa en un sistema de pilares (semicontributivo, contributivo, solidario y de ahorro voluntario), se abrió una ventana de traslados permitida por el artículo 76, que permite a hombres con 900 semanas cotizadas y mujeres con 750 semanas hacer el cambio de régimen incluso si les faltan menos de diez años para pensionarse.

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Sin embargo, las solicitudes de traslado se estancaron porque, según informes de gestión, Colpensiones aún evalúa las implicancias legales del artículo, “a la espera de la expedición de la reglamentación”.

Hasta septiembre, 36.741 personas habían solicitado la doble asesoría necesaria para iniciar el traspaso desde su fondo privado de pensión, y 12.945 de ellas ya habían pedido el cambio de régimen. No obstante, cerca de la mitad de estas últimas, es decir, 6.003 personas, no lograron completar el proceso porque Colpensiones aún no las recibe.

Blu Radio obtuvo estas cifras mediante un derecho de petición y reveló el creciente número de personas en espera. Además, el medio informó que “desde septiembre tanto las solicitudes de traslado como el número de personas en la ‘cola’ para entrar a Colpensiones siguieron creciendo”, lo que refleja el interés masivo por el traslado.

El atractivo del régimen de prima media se debe, en parte, a que ahí las pensiones suelen ser más altas para algunas personas que las que podrían recibir en el sistema de ahorro individual, ya que se benefician de un subsidio implícito del Gobierno.

Algunos expertos explicaron al medio que quienes buscan emigrar lo hacen porque “en el sistema de ahorro individual su pensión habría sido más baja que en el régimen de prima media”. Este subsidio es especialmente relevante para aquellos que cotizaron lo justo para acceder a pensiones subsidiadas, superando el valor de las cotizaciones realizadas.

Por otra parte, el Gobierno defendió la ventana de traslado al argumentar que muchas personas estaban utilizando la vía judicial para lograr el cambio. Según los reportes, aproximadamente 7.000 personas que solicitaron la doble asesoría ya habían demandado su afiliación al sistema de pensiones. El argumento del Ejecutivo pretende descomprimir tales litigios, sin embargo, la implementación se enfrenta a dificultades prácticas y jurídicas que aún no se resuelven.

Con el nuevo sistema, el umbral de cotización en Colpensiones se fijó en 2,3 salarios mínimos, lo que significa que aquellos que deseen una pensión mayor tendrán que completarla con su ahorro individual. Este cambio implica que aquellos que aún están en proceso de transición podrían ser de los últimos en disfrutar de los mencionados subsidios, junto a quienes permanecen bajo el régimen de transición de la Ley 100 (Sistema de Seguridad Social). Las implicaciones de esta nueva norma están siendo estudiadas, y la espera ya generó un estado de incertidumbre tanto para los usuarios como para las instituciones involucradas.

El caso de Colpensiones sigue siendo un tema de evaluación del Comité de Transición Operativa de la reforma pensional. Las dudas técnicas y legales sobre el alcance del artículo 76 persisten mientras se delinean los pasos a seguir para cumplir con la normativa de manera eficiente. Este período de incertidumbre afecta directamente a millas de ciudadanos que buscan asegurar su futuro financiero bajo condiciones más favorables.

El complejo entramado de las pensiones en Colombia refleja los desafíos que enfrentan las autoridades en la implementación de políticas que den respuesta efectiva a las necesidades de una población en envejecimiento. La situación actual indica que, aunque hay un marco legal dispuesto para facilitar el cambio de régimen, la operatividad de dichas reformas no ha alcanzado la efectividad esperada. Mientras tanto, el aumento de personas en la lista de espera es un indicativo de la presión que recae sobre el sistema y las expectativas de millas de ciudadanos.