Gustavo Petro se encuentra en Brasil como representante de Colombia en el mayor evento político que ha realizado el país sudamericano en su historia, el G-20, creado en 1999 y que reúne a los países del G-8, la Unión Europea y representantes de las economías más fuertes del mundo. Según la página oficial del Gobierno español, el G-20 agrupa el 90% del “Producto Nacional Bruto (PNB por sus siglas) mundial, el 80% del comercio global y dos tercios de la población mundial”.
En esta oportunidad, la región tienen la presencia de gobernantes de países como Bolivia, Chile, Paraguay y Uruguay, que al igual que Colombia, se presentan como invitados. Asimismo, la Unión Africana hizo presencia desde el lunes 18 de noviembre de 2024 en Río de Janeiro en este evento, que irá hasta el 1 de noviembre de 2024.
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El presidente Petro y sus homólogos fueron recibidos por Luiz Inácio Lula da Silva en la Río de Janeiro, donde tuvieron un primer acercamiento para dialogar sobre políticas e intereses con respecto a las propias de los países más poderosos del mundo.
El mandatario colombiano tuvo una conversación con Sergio Díaz-Granados, presidente del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), además de una reunión con el ministro de Hacienda de Brasil, Fernando Haddad, en las que entabló temas económicos de trascendencia internacional.
En medio de su participación en estas reuniones, el mandatario aseguró para medios nacionales que había sacado buenas conclusiones de la plenaria en la que recientemente había hecho presencia. Según comentó a una de las preguntas hecha por un comunicador, el presidente aseguró, “bueno, yo creo que bien. Comparado por aplausos, indudablemente ganamos el aplausómetro contra Milei, pero lo que nos interesa es las ideas expresadas”, inició Petro.
Luego, tomando en serio la pregunta, Petro afirmó que consideró buena dicha reunión, porque “muchos de los asistentes” propusieron “ideas que no son viejas (...) no repiten lo que ya fracaso, abren nuevas perspectivas, unas posibilidades para un mundo que necesita resolver problemas gravísimos que pueden acabar con la especia humana”.
Luego de su intervención con los medios nacionales, la actitud del primer mandatario pareció no gustarle a sus detractores. El concejal Humberto Amín, también conocido como Papo, publicó en su cuenta de X su opinión sobre las palabras de Gustavo Petro: “‘Indudablemente ganamos el aplausómetro con Javier Milei’”, inició la actualización del cabildante del Centro Democrático: “Ya quisiera el Presidente Gustavo Petro tener la popularidad, aprobación y carácter del mandatario argentino. Por lo menos allá sí se condenan las dictaduras y NO se defienden a tiranos”, dijo Amín, haciendo referencia a las decisiones que se han tomado con respecto a la paz y los diálogos que se mantienen con los grupos armados.
La actitud de Petro y la reacción de Laura Sarabia
No obstante, previo a su intervención, el mandatario pareció sonreír ante las cámaras de los comunicadores presentes en este evento. Una persona pidió permiso a uno de los escoltas del presidente para que se pudiera ver bien y el propio Petro le pidió al hombre que se moviera, mientras decía de manera burlona “porque o si no, acabo con la prensa; entonces, ahí sí tienen razón en criticarme”. Detrás de él se encontraba Laura Sarabia sonriendo ante la situación.
La directora del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República (DAPRE por sus siglas), vestida de rojo, escuchaba atenta a Gustavo Petro, y cuando este pronunció sus declaraciones sobre el aplausómetro, la funcionaria sonrió de manera sarcástica a sus espaldas, para luego mirar a alguien a su lado y hacer caras por el comentario del presidente. En el resto de la intervención del líder del Pacto Histórico, Sarabia no reaccionó a sus palabras.