Alejandro Ramelli, nuevo presidente de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), entregó recientemente la cifra de impunidad que presenta Colombia en materia del conflicto armado con las extintas Farc, en medio de la noticia por la notificación al antiguo grupo guerrillero sobre los cinco nuevos macroprocesos que identifican “patrones criminales” en su contra.
Según una entrevista concedida a El Tiempo, Ramelli, quien posee un máster en Derechos Humanos de la universidad de París y un doctorado en Derecho de la universidad de Salamanca, explicó que el objetivo no es actuar en contra del proceso de paz, sino consolidarlo.
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Ramelli destacó que los delitos investigados no son solo un asunto del pasado, sino que continúan siendo relevantes en el presente. En un reciente auto, la JEP denunció el reclutamiento de menores y violencias cometidas contra niños y niñas en las filas de las Farc, incluyendo anticoncepción y abortos forzados, así como violencia de género. Este fallo es el primero de su magnitud en la historia judicial de Colombia, después de 50 años de conflicto armado.
De hecho, el nuevo presidente de la JEP destacó al medio nacional que los nuevos macroprocesos incluyen la imputación por 18.677 reclutamientos forzados que no fueron investigados ni condenados por la justicia ordinaria. Incluso, el magistrado aseguró que, hasta ahora, solo hay dos sentencias condenatorias por caminos judiciales ordinarios relacionadas con tales reclutamientos y ninguna en casos de anticoncepción forzada o violencia sexual; es decir, el grado de impunidad que ha existido históricamente en Colombia, supera el 99% en muchos delitos.
“Yo puedo decir que el 99,9. En judicializar esos casos, en dar una respuesta al país y en imputarlos. Estamos haciendo lo que históricamente la justicia colombiana no ha hecho en 50 años”, comentó Ramelli en diálogo con El Tiempo.
Pero el magistrado entregó un crudo panorama sobre la justicia ordinaria que actualmente opera en el país. Según comentó, en la actualidad el país atraviesa por un porcentaje superior al 92% en impunidad para todos los delitos existentes.
“Hay muchísima impunidad en todos los casos. O sea, la impunidad en Colombia está documentada en más del 92 por ciento en todos los delitos. En la delincuencia común y corriente. En los países más desarrollados la impunidad es del 10 por ciento”, señaló el magistrado al medio nacional.
El magistrado también hizo un llamado a la justicia ordinaria para que investigue los delitos que aún ocurren en el país, como el reclutamiento forzado y la violencia sexual, y sugirió que adopten metodologías investigativas similares a las de la JEP para combatir eficazmente estos fenómenos que se salen de su jurisdicción, pues los grupos armados que siguen delinquiendo no pueden ser juzgados por esa justicia. “No tenemos competencias. La alerta que yo quiero dejar es que siguen reclutando niños y niñas”, comentó Ramelli.
Entretanto, el magistrado de la JEP entregó detalles de los nuevos procesos que se les abrirá a los excombatientes de las Farc, mientras que el extinto grupo armado afirmó que estos temas ya fueron juzgados. Sin embargo, la justicia especial insiste en que deben ser notificados formalmente del auto, que supera las 800 páginas.
Los cargos incluyen reclutamiento forzado, utilización abusiva de menores, malos tratos a secuestrados, torturas y homicidios, así como violencias reproductivas y sexuales, por lo que las Farc deberán decidir si aceptan o no los cargos tras revisar el documento con su equipo jurídico.
Ramelli destacó que esta es la primera vez que se realiza una imputación de tal magnitud, respaldada por una investigación de más de seis años y la participación de más de mil víctimas. Según indicó, la JEP busca aportar verdad y justicia, elementos esenciales para la reconciliación y la no repetición de estos crímenes en Colombia.
“Estas verdades son esenciales para la reconciliación de Colombia y para la no repetición, porque esto sigue pasando en Colombia, sigue pasando el reclutamiento forzado, sigue la violencia sexual. Entonces, estas verdades son instrumentos para advertirle al país que esto no es el pasado. Esto es el presente. Y si no cambiamos el presente, no podemos cambiar el futuro”, señaló Ramelli al diario nacional.