El 16 de noviembre se conoció que Giovanny Rubiano García, nuevo superintendente de Salud, nombró interventores para siete EPS intervenidas por el Gobierno. La medida ha sido criticada por varios parlamentarios y expertos en el sector salud que señalan que la Unidad de Pago por Captación (UPC) está fallando, pues carece de un flujo ágil de recursos.
El presidente Gustavo Petro señaló que la UPC funciona a plenitud en todo el país, pero que no hay un sistema de atención preventivo. Aprovechó para culpar de nuevo a los actores privados en el sector salud.
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“Lo que falla en el sistema de salud no es la UPC que ha crecido como nunca, a pesar que se la robaron en el Covid, y en los fondos que tenían que utilizarse como reservas técnicas. Lo que falla es la ausencia de un sistema fuerte de atención primaria y preventiva en todo el país y hacer que sea la ciudadana y el paciente el eje rector del sistema y no la codicia privada”, escribió en su cuenta de X.
La Organización Pacientes Colombia, agremiación de pacientes a nivel nacional para el cumplimiento de sus derechos, cuestionó a Petro por las citadas declaraciones y le formuló las siguientes preguntas: “Si la UPC es suficiente, ¿por qué EPS intervenidas no prestan servicios? ¿Dónde están los resultados de atención primaria de 2023 y 2024? ¿Por qué nombran interventores sin perfil?”.
Las tareas que endilgó Petro a los nuevos interventores
El 16 de noviembre el presidente Gustavo Petro reiteró su intención de erradicar la corrupción en el sistema de salud colombiano, específicamente en las Entidades Promotoras de Salud (EPS), tras la reciente designación de nuevos interventores en siete de estas organizaciones. La decisión fue anunciada por el superintendente Nacional de Salud, Giovanny Rubiano García, quien reveló la intervención en EPS como Sanitas, Nueva EPS, Savia Salud, Asmet Salud, Emssanar, Famisanar y Servicio Occidental de Salud (SOS).
En su cuenta en la plataforma X, Petro instó a los nuevos interventores a trabajar con base en tres objetivos fundamentales: desmantelar por completo la corrupción, fortalecer la atención primaria y preventiva a través de la territorialización, y permitir que los pacientes elijan libremente a sus médicos dentro de sus respectivas regiones.
Con esto, el primer mandatario señaló que desea eliminar las fugas de capital que, por corrupción, se pierden restándoles a los pacientes la posibilidad de recibir la atención necesaria en los tratamientos respectivos.
Este cambio de liderazgo en las EPS se enmarca en un plan más amplio que busca implementar reformas sustanciales en el sistema de salud colombiano, con el fin de mejorar la calidad y accesibilidad del servicio. La intervención también responde a la necesidad de hacer un seguimiento riguroso basado en resultados y evidencia científica, en un esfuerzo por optimizar la atención a los ciudadanos.
Por su parte, el superintendente Rubiano García ha solicitado a las entidades de control que aceleren las investigaciones sobre los presuntos desfalcos en el sector. En sus declaraciones, enfatizó que es crucial poner fin a la concepción del sistema de salud como un negocio y, en cambio, garantizarlo como un derecho fundamental para todos los colombianos.
El contexto actual en el que se da esta intervención es de una crisis estructural en el sector salud de Colombia. Las autoridades buscan no solo mejorar la transparencia y eficiencia en la administración de las EPS, sino también garantizar que los ciudadanos accedan a servicios de calidad. Esta reforma, encabezada por el Gobierno, es vista como un paso decisivo para transformar el sistema de salud y resolver las falencias que durante años han afectado su funcionamiento, tal como algunos usuarios, en las redes sociales, lo han manifestado.