El miércoles 13 de noviembre, el Senado de Colombia dio su aprobación a un proyecto de ley destinado a erradicar el matrimonio infantil y las uniones tempranas. Esta iniciativa se convertirá en ley a partir de su sanción por parte del presidente Gustavo Petro.
La propuesta titulada “Son niñas, no esposas” no solo se centra en la prohibición del matrimonio infantil, sino que también tiene como objetivo implementar un programa nacional de atención integral. Este plan busca apoyar el desarrollo personal y ofrecer alternativas para el futuro de niños, niñas y adolescentes.
En ese sentido, una de las autoras de dicho proyecto de ley, la representante a la Cámara, Jennifer Pedraza contestó a una editorial de El Espectador con respecto al tema. En su mensaje Pedraza dice que la aprobación de la ley, es tan solo el primer paso y en su opinión las acciones que vienen después son “las más difíciles”.
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En la editorial de El Espectador se expresa que la prohibición no basta; es necesario un proyecto ambicioso que incluya educación sexual, diálogos culturales y acompañamiento. Se señala que Colombia sigue siendo un entorno hostil para la infancia, y que, sin una justicia eficiente y recursos adecuados, poco cambiará en la práctica. Se enfatiza que el camino hacia el cambio debe continuar.
Jennifer Pedraza respondió a lo mencionado en la editorial afirmando que el primer paso era modificar la ley, pero que ahora viene el verdadero desafío. Para ella, es crucial implementar de manera ambiciosa una campaña de prevención y pedagogía, destacando la importancia de involucrar a organizaciones sociales que ya trabajan en el territorio. Además, subraya la necesidad de promover la educación sexual y garantizar el acceso a la justicia. Pedraza concluye que la lucha sigue en pie.
“Así es. Lo primero era modificar la ley. Sigue lo más difícil: 1. Una implementación ambiciosa de la campaña de prevención y pedagogía. Clave: vincular organizaciones sociales que ya operen en el territorio. 2. Educación sexual y acceso a justicia. Entre otros. La lucha continúa”, escribió la representante por medio de su cuenta de X.
Por otro lado, en su momento, apenas la iniciativa fue aprobada en el Congreso de la República, la congresista hizo una publicación en su cuenta de X celebrando este hecho diciendo que “¡Hoy hicimos historia para la niñez de Colombia! Gracias a cada una de las personas que nos acompañaron, el Congreso aprobó el proyecto de ley para eliminar el matrimonio infantil. Esto es un triunfo de todas y todos”.
Y agregó: “Gracias a las organizaciones que lucharon, a las personas que firmaron, a mi equipo y a @alexandravasoch, por ser mi compañera en esta lucha. #SonNiñasNoEsposas es ahora una realidad que protege el derecho de nuestras niñas a vivir plenamente su infancia”.
En cuanto al proyecto de ley, según un informe de Unicef de 2022 titulado “Análisis de situación de los matrimonios infantiles y las uniones tempranas en Colombia”, el país ocupa el puesto 20 a nivel mundial en cuanto a uniones de niñas y adolescentes antes de los 15 años. Además, Colombia se encuentra en la posición 11 en el ranking mundial de uniones de menores antes de los 18 años, reflejando un contexto preocupante en este ámbito.
La situación de las niñas indígenas es especialmente alarmante, ya que aproximadamente una tercera parte de ellas contraen matrimonio antes de alcanzar la mayoría de edad con hombres que les duplican o triplican la edad. Esta realidad trae consigo serias repercusiones, como la violencia sexual, los embarazos en edades tempranas y el abandono escolar.
Actualmente, aunque Colombia ha firmado y ratificado instrumentos internacionales que prohíben el matrimonio infantil, como la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer, el Código Civil permite que adolescentes desde los 14 años puedan contraer matrimonio con el consentimiento de sus padres o tutores legales.